Cada año por estas fechas los niños se sienten solos y aburridos, no hay colegio y sus padres trabajan más que en todo el año. Por lo tanto, necesitan que alguien se ocupe de ellos que disponga de tiempo para entretenerlos, divertirlos y acompañarles a la playa. Muchas familias optan por mandar unos días a sus hijos de campamento, y así premiarles con las merecidas vacaciones que prosiguen al duro curso escolar.

El campamento Cala Jondal es uno de los más conocidos, ya que lleva muchos años y generaciones entreteniendo a los niños, y los padres son conscientes de que dejan a sus hijos en buenas manos. Este grupo de monitores jamás ha tenido una queja, ni una reclamación. Están muy bien preparados y aseguran que se divierten tanto o más que los propios niños. Junto al grupo de personas encargadas del campamento, también cuentan con monitores de la Cruz Roja. Durante todo el verano se organizan diferentes grupos, que se distribuirán en fechas distintas a lo largo de julio y agosto. Así todos los niños que quieran disfrutar de las actividades de Cala Jondal dispondrán de una plaza.

Este lunes dio comienzo un nuevo campamento. Los niños forman grupos según las edades. Los más pequeños son los de 8 años y los mayores tienen 14. Cada grupo estará bajo la vigilancia y el cuidado de varios monitores; dependiendo de la cantidad de infantes tendrán a su alcance entre 2 y 3 adultos. El primer día se informa de las normas del campamento para procurar que todos se comporten según lo previsto y nadie cree problemas. A continuación, los profesores del entretenimiento enseñan juegos de presentación para que todos se conozcan. Y así es más fácil el reparto de tiendas de campaña, son los propios niños los responsables de formar sus grupos de entre 4 y 5 compañeros.

Una vez al día gozarán de un refrescante chapuzón en la playa. Entre los diferentes entretenimientos se encuentra la 'ginkana brut', los talleres de camisetas, donde los 'peques' podrán dar rienda suelta a su imaginación y llevarse un bonito y artesanal recuerdo a sus casas. Igual de artística es la creación de collares y pulseras de hilos que podrán regalar a sus madres al finalizar el campamento. Entre las actividades programadas también está el tiro con arco, y las salidas fuera del campamento. El martes, por ejemplo, pasaron el día en Platja d'en Bossa aprendiendo a divertirse con los deportes acuáticos. Otro día pudieron practicar el senderismo, desde cala Jondal hasta ses Salines, donde acamparon y durmieron. Según Manu, el monitor de los más pequeños, la actividad preferida de los niños es la 'velada nocturna' en la que se realizan danzas y juegos como el escondite. El próximo lunes estos pequeños volverán a sus hogares felices por la experiencia vivida y con ganas de repetir.