EUGENIO RODRÍGUEZ10/12/02 0:00
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Las previsiones del turismo británico para el próximo verano son, por el momento, más buenas que el año pasado. Así lo aseguró ayer el conseller de Turismo, Celestí Alomar, que mantiene que la reserva de plazas para la temporada que viene está un 16 por ciento por encima de 2001. El conseller calificó de «muy positivos» estos resultados, que están muy cerca de la subida media registrada en el país, un 18 por ciento, y por encima de las que están obteniendo Mallorca y las Islas Canarias, donde las reservas han aumentado un 13 por ciento.

El mercado ha subido un 20 por ciento. El mayor crecimiento se ha registrado hasta ahora en la península con un incremento del 33 por ciento, mientras que en Menorca, destino británico por excelencia, sólo ha aumentado un 9 por ciento en relación al año pasado.

Alomar avisó, eso sí, de que se tratan de previsiones de cómo está actuando el mercado en este momento. «Eso no quiere decir, en el caso de Eivissa, que la temporada que viene habrá un 16 por ciento más de británicos, pero por el momento los touroperadores ya han vendido un 16 por ciento de plazas más que el año pasado, lo que es muy positivo si tenemos en cuenta que octubre fue un mes muy malo», explicó.

Además, el conseller destacó que el Govern balear espera también un importante incremento de los turistas británicos que contratan sus vacaciones de forma directa, que «podrían aumentar en los próximos 4 años hasta un 40 por ciento».

Este periódico publicaba ayer que Balears cifra ya más de 550.000 reservas turísticas en el mercado británico para 2003, de las que 140.000 corresponden a Eivissa, superando con ello las previsiones de los grupos turísticos TUI (Thomson) y Thomas Cook (JMC) y en unas 100.000 las reservas que se había formalizado a principios de 2001 en el Reino Unido.

En cuanto al turismo alemán, y a la espera de las primeras cifras oficiales que se conocerán en la Feria Internacional de Turismo de Berlín, la ITB, los expertos opinan, según Alomar, que la situación económica del país no va a recuperarse en el 2003, sino que se producirá probablemente un estancamiento. «Para hacer previsiones del comportamiento germano es aún muy pronto. De todos modos, dada la crisis, no esperamos que haya un aumento en relación al año pasado. Sólo podemos esperar que se estabilice», indicó Alomar.