De las 384 enmiendas parciales a los presupuestos defendidas por
la oposición durante dos días sólo fue aprobada una, que está
dirigida a abrir una partida de 532.705 euros para realizar mejoras
en los municipios. El debate presupuestario estuvo marcado por la
retirada de Els Verds de tres enmiendas parciales, evitando así la
apertura de una crisis en el Ejecutivo balear en el caso de que la
consellera «verde» de Medi Ambient, Margalida Rosselló, hubiera
votado en un sentido distinto que el Govern.
La consellera hubiera sido destituida en el caso de que hubiera
votado a favor de estas enmiendas, lo que hubiera supuesto
desvincularse de la opinión política del Pacte y del presidente
balear, Francesc Antich. Antich recordó que ninguna de estas
enmiendas parciales había sido «pactada ni negociada» con el resto
de formaciones políticas del Pacte y afirmó que «no cabe en la
cabeza» que la consellera votara de manera distinta a sus
compañeros del Govern.
La unica enmienda que mantuvo Joan Buades sobre mejoras de salud
mental en Eivissa y Formentera fue rechazada con sólo un voto de
diferencia en una interminable sesión parlamentaria que se prolongó
hasta la madrugada. «No lo puedo probar, pero Antich le dijo a
Margalida Roselló hace 15 días que esta enmienda no se podía votar
porque le dijeron desde Eivissa que sería un punto para Els Verds»,
aseguró Buades. Santiago Ferrer y Miquel Ramón intervinieron en
este debate sobre salud mental. Miquel Ramon propuso que la nueva
residencia que se va a hacer para mayores haya una zona para salud
mental. «Tiene un nivel argumental increíble.
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