E l verano es divertido. Para el equipo de artistas de Party Planet, una conocida empresa de animación de fiestas de distinta índole, puede resultar cada día una aventura en la que nada más levantarse de la cama pueden irse directamente a decorar una sala de fiestas, para después de comer acudir a una fiesta infantil de cumpleaños en un domicilio particular, a media tarde hacer un espectáculo infantil en una fiesta de barrio o pueblo, a la caída del sol dar vida a un show en un hotel atestado de turistas de varias nacionalidades, a media noche salir a la calle en la rúa de una determinada fiesta de una conocida discoteca para después hacer performances a lo largo de la noche o acudir a una despedida de soltero o soltera para dar el toque picante durante el postre. Para todos ellos es algo normal y forma parte del atractivo de su trabajo, para la gente de a pie, puede resultar un tanto caótico. Lo que para muchos puede suponer una locura de papeles, personajes, vestidos y situaciones forma parte del desorden ordenado de la rutina de estos animadores del verano.
Raquel Esteban, la directora de todo el tinglado, es el alma y la que marca el espíritu de buen rollo de todo el colectivo que forma parte de Party Planet. En el montaje de la decoración de la zona Chill Out de la Flower Power comentaba que «es un orgullo montar parte de la decoración de esta fiesta, la más antigua y emblemática de Pachá. Siempre me hace mucha ilusión venir para montar parte de ella», explica a una hora temprana de la mañana de un domingo que se anuncia largo y cargado de papeles, ropas, maquillajes y personajes muy diferentes.
«Trabajar con artistas siempre es muy creativo», señala Pilar, otra de las integrantes de la familia Party Planet, quien de los múltiples personajes de su repertorio se queda con el de camarera sorpresa. «Yo siempre digo que sí a todo y el truco está en no tener vergüenza. Mi vida siempre ha sido un tanto teatrera y me he dedicado a picotear en distintos personajes pero me quedo con el de camarera sorpresa porque juegas con el público».
Mariano, otro compañero, coincide con Pilar a la hora de quedarse con el personaje de camarero cómico. «Te involucras más y es una actuación muy comprometida en la que actúas al cien por cien», destaca este joven al que los cambios de papeles no le asustan: «Eso va con el artista y con el tiempo. Tú te pones y el personaje te lo da todo».
Carol, una de las componentes más veteranas del grupo repite por cuarto verano consecutivo. «Está claro que muchos días te cansa, pero te compensa porque es bonito. A mí me gusta porque conoces mucha gente y al mismo tiempo, antes de la actuación existe todo un proceso de caracterización del personaje en el que tu formas parte de él. Lo haces todo corriendo pero forma parte del trabajo y le da emoción», destaca.
Para Sabina, otra de las veteranas de Party Planet, lo más fácil es conectar con el público. «Lo complicado es mantenerse durante toda la actuación», confiesa esta habitual de los «cambios de chip».
Ferrer, otro de los colaboradores de Party Planet, es más escueto a la hora de definir su trabajo en la compañía: «Me gusta sentirme parte de la fiesta y este tipo de trabajos siempre me han atraído», dice.

Malabares y equilibrios
Por su parte, Merche y Raquelita forman parte del tandem más divertido de la compañía. Dedicadas al trapecio, juegos malabares y acrobacias le han cogido el gusto a las prisas y los cambios. «Es algo que tiene magia y me gusta porque tiene una parte muy creativa que hace que trabajes con tus ideas», explica Raquelita.
Víctor, nuevo fichaje, señala que con esta práctica ha aprendido a actualizar y explotar muchos de sus recursos interpretativos.
«Muchos personajes están armados de improvisación y es algo que nos gusta», comentan Rosana y Guillermo, especializados en los performances de discotecas. «En las fiestas Retro y Euforia a lo largo de toda la noche interpretamos a distintos personajes y las prisas tienen mucha magia a la hora de ponerse en el papel y a mí me gusta mucho este ritmo trepidante de trabajo», explica Rosana.
Ana, Esther y David encargados del show de variedades 'Ibiza mon amour', en el que interpretan distintos personajes y situaciones a lo largo de 2 horas con cambios vertiginosos de personajes y vestuario dicen que este ritmo de trabajo está bien. «Para mí no es difícil. Simplemente se trata de actuar y no me cuesta porque me centro en el papel de cada momento, pero sí que tengo un poco de complejo de personalidad múltiple, dice bromeando. David, por su parte, cree que esta labor es una buena oportunidad profesional para hacerse con el público de la isla formado por legiones de turistas de distintas nacionalidades.
Para todos los componentes de Party Planet cada día es diferente y está lleno de situaciones y sketchs nuevos. Son muchos papeles durante muy pocas horas que sirven para dar un toque diferente a fiestas de distinta índole que sirven para que cientos de visitantes de la isla de Eivissa se lleven un buen recuerdo, inmortalizado en numerosas ocasiones en fotografías, de su estancia vacacional.
Eva Estévez