El diputado del Grupo Mixto y ex portavoz parlamentario de Unió Mallorquina en el Parlament, Bartomeu Vicens, prestó declaración ayer en el Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJIB) sin que la Fiscalía haya pedido intensificar las medidas cautelares sobre él, que irían dirigidas a evitar una posible destrucción de pruebas, por lo que salió de las dependencias judiciales en libertad provisional, las mismas condiciones en las que se encontraba antes de su comparecencia.

El también ex conseller de Territorio del Consell de Mallorca abandonó la Audiencia Provincial de Palma eludiendo hacer declaraciones y se limitó a decir: «He quedado bien».

Vicens declaró ante el juez que instruye parte del caso Son Oms por una presunta trama de corrupción urdida en torno a la recalificación del polígono palmesano. En concreto, fue interrogado acerca de nuevos informes aportados a la causa que, según la Fiscalía Anticorrupción, hacen referencia a las presuntas vinculaciones económicas e inmobiliarias que Vicens mantuvo con la empresa Vipasima cuando era conseller insular.

En este sentido, el fiscal hace referencia a supuestos pagos que la sociedad Vipasima, perteneciente a la familia de empresarios Gea, imputa como realizados en 2006 por 72.848 euros a Metalumba -presunta tapadera de Vicens destinada a ocultar ingresos irregulares y realizar inversiones- y que, mientras no sean justificados, podrían ser constitutivos de un delito de cohecho.