El empresario ibicenco y ex-ministro de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, rechazó participar en la compra de Spanair al grupo escandinavo SAS ante la condición 'sine qua non' del grupo inversor interesado en la adquisición de trasladar su sede de Palma de Mallorca a Barcelona.

Así lo confirmaron fuentes cercanas a Matutes, quienes explicaron que como empresario de Balears, no podía aceptar de ninguna manera el traslado de la aerolínea a la capital catalana, de forma que sólo hubiera participado en la compra de Spanair si se hubiera garantizado el mantenimiento de la sede en Palma.

En este sentido, señalaron que cuando le ofrecieron a Matutes formar parte del grupo de empresarios que adquirirán Spanair, dijo que lo «estudiaría abiertamente», si bien rechazó la idea en el momento en el que le anunciaron el traslado de la residencia de la compañía a Barcelona.

Por su parte, el presidente del Govern, Francesc Antich, aseguró esta mañana que «respeta» que «no haya habido una apuesta» por parte de los empresarios de Baleares por adquirir Spanair, cuya compra por empresarios catalanes se dará a conocer en breve.

Recordó el «escaso margen de actuación» del Ejecutivo en esta operación, pese a que mantuvo conversaciones con la Cámara de Comercio para analizar si había interés en las islas para comprar la compañía aérea con sede en Palma.