El joven mago madrileño, Jorge Blass, ya se encontró con el público ibicenco hace dos años, al igual que en esta ocasión, dentro del festival Magiclown. Recuerda aquella actuación como «muy especial. Se creó una atmósfera muy diferente a la que puede haber en un teatro». Ha trabajado en televisión y ha recibido varios premios internacionales. Jorge Blass es un mago que apuesta por la fusión y la innovación en esta legendaria profesión.

-¿Cuándo hiciste tu primer truco?

-Tenía doce años y era un truco con unas cuerdas: la cuerda tricolor. Han pasado unos añitos pero me acuerdo perfectamente. Eran tres cuerdas de tres colores diferentes que se fusionaban mágicamente.

-¿Has vuelto a hacerlo?

-Eso fue un poco una predicción porque el truco que de alguna forma me dio a conocer fue el que hice para un anuncio de televisión. Era con unas cuerdas y estaba un poco inspirado en ese primer juego. Parece que sí, que las cuerdas de alguna manera me persiguen.

-¿Qué prefieres para tus números, las cartas, los pañuelos, las palomas o, precisamente, las cuerdas?

-Me gusta la magia clásica pero también otro tipo de magia que se sale de lo convencional. En el espectáculo utilizo una bola de bolos o juego con objetos que me presta la gente o hago uno que es una tormenta de nieve que cubre a todo el público. Me gusta mucho la magia cuando se fusiona con otras artes, como la música o la danza. El espectáculo de hoy en Eivissa, vamos a hacer una fusión de magia y música rap. Hacemos también un número con un músico, que es Nacho Aldeber que toca el Hang. Me interesa la magia que hace que el público participe y qué ocurran cosas con él.

-Es una de las profesiones más antiguas. ¿Cómo se puede innovar en el mundo de la magia?

-Es verdad que es muy difícil innovar pero es necesario. Lo peor que puede tener la magia es que sea previsible, que el público sepa lo que va a pasar. Los magos estamos todo el tiempo trabajando para sorprender. a los trucos clásicos hay que darle s un giro. Esto es también apasionante, estar siempre innovando e intentar conseguir el más difícil todavía.

-Juan Tamariz fue tu maestro. ¿Qué aprendiste de él?

-Él ha popularizado la magia en España y es el maestro de todos los magos españoles. Creo que todos hemos aprendido de él la forma en la que presenta los juegos con humor. Él ha desarrollado un montón de técnicas y formas de entender la magia. Estudié en su escuela a los doce años y fue la mejor escuela posible. Luego hacíamos reuniones muy curiosas que casi siempre eran de noche y pasamos horas y horas ensayando y aprendiendo magia. Ahí Juan es muy generoso, siempre se vuelca.

-¿A esas horas es cuando hay más magia?

-Es un momento en el que te inspiras más y que no hay distracciones. Si que es una hora de brujas.

-Hablando de maestros, ¿eres fan de Copperfield o prefieres a Houdini?

-Houdini es un grande, es el mago más legendario de toda la historia. En realidad, él era escapista más que mago.

Copperfield ha sido el gran innovador y ha conseguido revolucionar la magia. Aunque no es el estilo que más me gusta. Soy muy fan de dos magos americanos, Penn y Teller. Son dos comunicadores bestiales y hacen autentica magia. Otro que me encanta es Lance Burton, es más clásico y se corresponde a la típica figura del mago elegante.

-¿Durante alguna actuación ha fallado la magia? ¿Cómo lo has resuelto?

-Muchas veces y además, tiene que pasar. Siempre hay varias soluciones o salidas. Es la capacidad de improvisar. Tenemos que ser maestros de la improvisación porque el show debe continuar.

-¿Qué hay que estudiar para ser un gran mago?

-Te tiene que apasionar para dedicarle muchas horas. También debes tener buenas dotes de comunicación y sobre todo, es practicar y practicar. Cuando estás cansado de practicar sigues practicando. Hay juegos de magia que puedes estar desarrollando varios años.