Finalmente, tres artefactos de escasa potencia estallaron a lo largo de la tarde de ayer en diferentes puntos de Palma.

El primero de los explosivos estalló, a las 14:10 horas, en el restaurante La Rigoletta, frente a la Platja de Can Pere Antoni, en la zona del Portixol. Según las primeras investigaciones realizadas, el artefacto estaba ubicado en el falso techo de la zona de los baños. La citada explosión no ocasionó daños personales, pero como consecuencia de la onda expansiva cayeron unos cuatro o seis metros cuadrados de falso techo. La zona fue rápidamente evacuada y se acordonó los alrededores.

A partir de ese momento, agentes del Cuerpo Nacional de Policía iniciaron un rastreo minucioso de las zonas adyacentes. Al llegar al bar Enco, ubicado en la calle Vicario Joaquín Fuster, a la altura del número 5, los investigadores localizaron un segundo artefacto colocado en el techo del baño. Antes de que llegasen los artificieros, la bomba hizo explosión causando daños materiales.

Poco después se vivieron instantes de descontrol y nerviosismo. Una mochila que se encontraba debajo de un turismo, en tercera línea de playa des Molinar, encendió todas las alarmas. Finalmente se comprobó que se trataba de una falsa alarma.

Minutos más tarde, empleados del antiguo Palacio Avenida, sito en las Avingudes, junto a la Estación Intermodal, daban el aviso a la policía de que habían abandonado dos maletas en recepción.

En cuestión de minutos agentes del CNP y de la Policía Local de Palma acordonaron la zona, marcaron un perímetro de seguridad y desalojaron el complejo hotelero. Al final, todo resultó ser una falsa alarma. Unos turistas habían olvidado su equipaje y, poco después se personaron en el hotel y la situación se normalizó.

A las 18:10 horas, se produjo la tercera y última explosión. En esta ocasión, al igual que en las dos anteriores, se trataba de un pequeño artefacto colocado en el baño de las mujeres de las galerías comerciales, sitas en la Plaça Major de Palma. Concretamente en los servicios públicos que se encuentran junto a la escalera mecánica que da acceso a la Vía Sindicato, a unos 25 metros de la sede del PSIB-PSOE de Palma.

Por otra parte, a las 12:15 horas de ayer, se producía una explosión en el bar Nica, de la calle Comte Sallent de Palma, pero los servicios de los Bombers de Palma confirmaron que se trataba de una acumulación de gas metano. Sin embargo, la Policía Científica volverá a revisar en la mañana de hoy el bar para despejar cualquier duda.

Mateu Alemany se encontraba en su domicilio, situado justo encima del restaurante La Rigoletta, en el Paseo des Portitxol, cuando explotó el primer artefacto. «La verdad es que impacta cuanto te toca de cerca» aseguró el ex presidente del Mallorca.