La formación política Gent per Formentera (GxF) mostró ayer su «alarma» y su «enorme preocupación» por los vertidos de aguas fecales que se han producido en pleno parque natural de ses Salines. «Este es un hecho gravísimo que requiere explicaciones ineludibles de la Conselleria de Medi Ambient del Govern balear al gobierno y al pueblo de Formentera», dicen desde esta formación política, donde también piden la «asunción de responsabilidades» y la «adopción inmediata de las medidas técnicas necesarias para garantizar el óptimo estado y el perfecto funcionamiento de las instalaciones de la planta depuradora para evitar que un accidente de esta naturaleza se repita, poniendo en peligro tanto la salud pública como un tesoro natural de valor incalculable y patrimonio de todo el pueblo de Formentera», indicaron desde Gent per Formentera.

En definitiva, desde la formación piden una «intervención eficiente y definitiva» para evitar la repetición de vertidos contaminantes.