Dar una visión positiva, competente , activa y práctica del envejecimiento es uno de los objetivos del curso «Envejecer con sabiduría» coordinado por la catedrática de Universidad del Departamento de Pedagogía y Didácticas Específicas de la Universitat de les Illes Balears junto a Lluís Ballester, profesor titular del mismo departamento, dentro de los cursos de la Universitat d'Estiu. Orte abordó ayer el tema de educación y envejecimiento en la intervención ofrecida junto al catedrático Martí March en el que aportaron su visión acerca del futuro de los mayores y las herramientas para conseguir una mejor calidad de vida. Precisamente, la UIB creó el año pasado la cátedra de Atención a la Dependencia y Promoción de la Autonomía con el apoyo de la Conselleria d'Afers Socials del Govern.

Con este curso se trata de que acercar la idea de «ver cómo es posible envejecer de una forma saludable viendo diferentes perspectivas: la persona es muchas cosas, es sexualidad, es actividad fíisica, nutrición y prevenir la enfermedad», apuntó Orte, que defendió vincular el nivel educativo con envejecimiento. «Cuanto mayor es el nivel educativo mejor es la situación de la persona en muchos niveles; el nivel educativo permite acceder al conocimiento, que es una plataforma para acceder a todo los demás, como la mejora de las relaciones sociales», aseguró.

El concepto del abuelo tradicional va dejando paso a otra visión de los mayores. «Uno de los grandes cambios del siglo XXI va a ser la percepción de los mayores. La gente que llega ahora a la prejubilación o la jubilación es gente más preparada, con un nivel educativo mayor, con menos niveles de pobreza. Los nuevos mayores van a ser muy distintos porque han vivido otro tipo de vida. Los perfiles de los nuevos mayores van a ser mucho más activos, con más visibilidad, impacto político y presencia social», vaticinó Martí March. Orte señaló, en este sentido, el papel que ha de desempeñar la administración «que ha de ser consciente que tiene que desarrollar políticas concretas» no limitadas sólo a viajes o clubes de mayores.

March defendió la idea de ir consolidadando una jubilación mucho más flexible y no obligatoria de cara al futuro, «que sea progresiva, no discriminada por edad; creo que habrá más jubilación flexible porque de alguna forma es diferente cada individuo».

Orte destacó también la importancia de que los mayores inviertan en autonomía personal para poder decidir el tipo de vida enlos años que le quedan y «eso es envejecer con sabiduria».