El Ayuntamiento de Eivissa ha aumentado la vigilancia policial en los pasajes del barrio de es Pratet tras la denuncia por escrito presentada por la asociación de vecinos en la que denuncian «ruidos y suciedad en las zonas exteriores residenciales en horario nocturno provocada por los clientes de los bares de copas; vandalismo manifestado en las pintadas que inundan las zonas comunes, y la utilización del espacio público para el ofrecimiento y demanda de servicios sexuales».

Según explicó el presidente de la Asociación de Vecinos de es Pratet, Juan José Sánchez, tras esta denuncia, los vecinos mantuvieron una reunión con el teniente de alcalde de Urbanismo, Vicent Torres, quien les explicó que el Consistorio tiene previsto «reforzar la vigilancia policial, algo que se ha notado, y también cambiar el horario de las seis de la mañana para reducir las molestias» indicó Sánchez, sobre la hora de cierre que podría volver a cambiar para los café concierto, ya que los vecinos temen que este problema se agrave ya aseguran tener constancia de que se están solicitando licencias para este tipo de actividad. «Estamos dando tiempo al tiempo para ver si llegan las soluciones», concluyó el presidente de la asociación.

Según el escrito de denuncia, en esta zona de es Pratet se cometen infracciones a la ordenanza municipales de protección del medioambiente y la salud frente a la contaminación acústica, y a la ordenanza para fomentar y garantizar la convivencia ciudadana y las conductas cívicas en el espacio público.

Asimismo, en su comunicado, los vecinos recuerdan que desde hace años padecen durante todas las noches de verano y fines de semana de invierno ruidos que impiden el descanso y que por las mañanas se encuentran «con los restos de las necesidades fisiológicas de los clientes de los bares, vómitos por suelo y paredes» así como «restos de vidrios» en sus portales.