S. PARRA / RUIZ COLLADO

El plan piloto de implantación de un programa Turismo Senior Europa (un remedo de las vacaciones del Imserso pero para ciudadanos comunitarios) tenía que ser este invierno uno de los soportes que permitiera, o al menos ayudara, mantener cierta actividad de la industria turística de Eivissa, así como de su oferta complementaria. Pues bien, este flotador ideado como alternativa de futuro ha pinchado estrepitosamente. Este mes debían haber llegado los primeros turistas pero no será hasta principios de año que, con suerte, los jubilados europeos empezarán a gastar sus pensiones en los negocios de la Isla.

Según Joaquín Martínez, director financiero de la agencia Viajes Zoetrope a la que se adjudicó el proyecto en julio pasado, «se está viendo una mejor respuesta en los mercados europeos para los primeros meses de 2010 que para los últimos de este año; de hecho, para ahora tenemos algunas reservas en Mallorca pero ninguna en Eivissa y Menorca. La cosa no parece que vaya a empezar a funcionar hasta principios de año». De hecho, al parecer este octubre llegarán unos 70 turistas a Mallorca, mientras que no hay ninguna reserva para las Pitiüses. En total, hasta ahora hay unas 4.500 reservas, la mayoría de ellas para Andalucía.

La situación es tal en Eivissa que dos de los tres establecimientos de cuatro estrellas (es la categoría mínima impuesta por el Ministerio de Turismo) con los que se han firmado contratos permanecen cerrados. «Como no podemos ofrecerles clientes y ellos no podían lograr reservas por otro sitio, es lógico», dijo el ejecutivo de Zoetrope, quién anunció que la relación con los hoteles ibicencos se retomará en cuanto haya suficientes reservas.

Falta de tiempo

Pero, ¿cuál es el motivo de que el programa Turismo Senior Europa quede aparcado? Segittur, entidad estatal para la innovación en materia turística, sacó a concurso por 10 millones de euros este proyecto, que en abril quedó desierto. Se abrió entonces un proceso de emergencia que culminó a principios de julio con la adjudicación a Zoetrope de la explotación de este servicio.

«Por esta razón la comercialización en Europa empezó en septiembre. Los viajes del Imserso funcionan bien en España porque son conocidos, llevan unos 17 años funcionando, pero en España es nuevo y cuesta arrancar. Se tenía que haber empezado a comercializar en marzo o abril», explicó Martínez, quién añadió: «La cuestión es que para venderlo tenemos que hacerlo a través de touroperadores, la mayoría de los cuales tienen ya cerrada su programación y sus catálogos».

La cuestión de la paralización del programa hasta inicios de año no supone una buena noticia para la industria turística ibicenca, pero tampoco es una circunstancia crítica para el sector, según reconocieron fuentes hoteleras.

Según se había comunicado a algunos empresarios, para Eivissa estaban previstas unas 4.000 plazas, lo que distribuido en siete meses suponía poco más de medio millar de turistas al mes o, con viajes estándar de 10 días, la ocupación plena de un hotel de 110 habitaciones.

A esta escasa incidencia en los ingresos hoteleros y del mantenimiento de empleo (se contratan hoteles abiertos todo el año), se suma que los turistas vienen con pensión completa, lo que, unido a su condición de pensionistas, no ofrecía grandes perspectivas para la oferta complementaria.

Los problemas que han llevado a la suspensión temporal del proyecto parece que no afectan tanto a Andalucía. El director financiero de Zoetrope reconoció que la iniciativa estaba funcionando algo mejor en la Costa del Sol y la Costa de la Luz, las dos zonas andaluzas acogidas a este plan, y apuntó que «seguramente será por la Costa del Sol es más conocida en determinados países, quizás también por cuestiones climatológicas e, incluso, por la disponibilidad de infraestructuras turísticas».

Turismo Senior Europa ofrece estancias subvencionadas (a partir de 25 euros por día) a mayores de 55 años de unos 20 países de la UE para venir entre octubre y abril. La previsión era ofertar 80.000 plazas, 40.000 en Andalucía y otras tantas en Balears, con la posibilidad de trasvasarlas de un sitio a otro según la demanda. Desde Zoetrope se reconoció ayer que la baja demanda en el tramo inicial del programa podía hacer que se cubriera sólo un 70% (unas 56.000).