El tramo terrestre del gasoducto, que conectará la planta receptora de Cala Gració con la planta generadora de energía de GESA en Vila, se iniciará la semana próxima y se espera que esté concluido a finales de mayo, según informaron ayer en rueda de prensa el conseller de Política Empresarial, Joan Serra Mayans, la directora general d'Energia del Govern, Marilena Tugores, y el director general de GESA Gas en Balears, Javier Nausía.

La canalización sigue, en casi todo su recorrido, el trazado de la carretera que une Sant Antoni con Vila «lo que significa que se producirán restricciones en la circulación y habrá que coordinarse para regular la circulación», apuntó Nausía, quién consideró que se trata de unas molestias inevitables. «Si el gasoducto no pasa por zonas privadas porque la sociedad ha pedido que lo haga por áreas públicas, habrá que soportar las posibles afecciones», añadió.

En todo caso, destacaron desde la empresa gasista y confirmó Serra Mayans, los cortes afectarán únicamente al arcén y a uno de los dos carriles del lado de la vía en que se ejecuten, por lo que se pretende que siempre haya espacio para la circulación de vehículos. «El corte en cada punto será diferente, en función de la dificultad de los trabajos o la climatología, pero serán unos pocos días», añadió el representante de GESA.

Coordinación

El conseller ibicenco avanzó que en dos semanas habrá una reunión con la empresa para conocer en detalle la planificación de las obras y poder así coordinar los esfuerzos de las administraciones.

Josefa Costa, edil de Urbanismo de Sant Antoni que se encontraba en la presentación junto con la concejal de Santa Eulària Maria Ferrer, demandó que «dado que los trabajos afectarán a Cala Gració, una zona turística, pedimos desde el Ayuntamiento que los trabajos de allí se hagan lo antes posible». A esta petición, Nausía respondió que «el sentido de la construcción será, en general, en dirección de Cala Gració a Vila».

En cuanto a la red que dará servicio a los particulares y empresas, no hay fecha prevista para su desarrollo. Principalmente se extenderán los ramales secundarios a Sant Antoni y Vila, aunque también se cuenta con permisos para hacerlo en Sant Josep y Santa Eulària.

Respecto a las expropiaciones, todas las partes destacaron su reducido volumen, de menos de 5.500 metros cuadrados.