Cristian, de siete años, se disfrazó de esqueleto para la fiesta solidaria de Halloween de Piruleto: «He venido con mi padre y con mi amigo Fran, que también va de esqueleto», explicó el niño, mientras su progenitor aguantaba la guadaña del pequeño. La carpa del Recinto Ferial acogió ayer esta fiesta solidaria a beneficio de la Plataforma Sociosanitaria. «Forma parte de una serie de eventos que organizamos para recaudar fondos [el último fue la fiesta de Harry Potter en la discoteca Privilege] para la plataforma, pues estamos en un momento de mucha necesidad. Tenemos terapias que han triplicado sus servicios y a lo mejor una familia que antes podía pagar un terapeuta privado en la actualidad no puede y recurre a nosotros, por ejemplo. En este momento nos faltan recursos», explicó Carmen Villena, presidenta de la Plataforma Sociosanitaria.

Las brujitas, como la pequeña Leila de tres años, se mezclaban con vampiros y vampiresas, esqueletos, monstruos y hasta incluso Spidermans y princesas Disney, como Blancanieves o Pocahontas. «Querían disfrazarse sí o sí y como teníamos vestidos de piratas y Blancanieves del Carnaval de este año, pues hemos optado por eso», explicaba María, la mamá de Alejandro, que iba de pirata, y Lucía, disfrazada de la princesa que tenía como amigos a siete enanitos.

Mientras niños y algún que otro mayor correteaban por la carpa esperando la aparición de Piruleto en el escenario, la cola para el pasaje del terror aumentaba según pasaban los minutos. «A mí no me ha dado miedo, pero a él sí», afirmaba Camila, de diez años, que pasó por el túnel del terror con su hermano Daniel, de seis. Con el sonido de la algarabía infantil de fondo, Piruleto, que abandonó su atuendo más colorido por la apariencia de vampiro, saludó a su público más fiel. Segundos después una buena representación infantil estaba en el escenario con el payaso para cantar las canciones infantiles más divertidas: «Vamos a hacer un examen. ¿Quién se sabe las horas? Ya son la una, vuela la luna. Ya son las dos, diciéndote adiós. Ya son las tres, la vuelta del revés», cantaba el Piruleto vampiro mientras bailaba con los pequeños. A la actuación de Piruleto y Gominola, que iba disfrazada de brujita, se sumaron las actuaciones del mago Lorenzo, el espectáculo de baile de Capricorn, los castillos hinchables y sorteos de regalos para todos, incluso para quienes optaron por no disfrazarse. María José Real