La solución para los podencos maltratados de la finca de Ca na Yuca de Es Cubells aún tardará en llegar. Un cruce de recursos judiciales entre el propietario de la jauría, Bartolomé Marí Ribas Sendic, y la protectora de animales, The Bright Eyes, podría posponer un mínimo de tres meses el cumplimiento de la sentencia por la cual Sendic debe ingresar en un centro psiquiátrico por un período de un año por criar de «manera incontrolada» y en «condiciones insalubres» a más de un centenar de podencos.

El Ayuntamiento de Sant Josep está a la espera de que Sendic ingrese en un centro para actuar y poner a salvo a la jauría. Sin embargo, éste ha recurrido la sentencia que obliga su internamiento, solicitando que el tratamiento se lleve a cabo de forma ambulatoria. Una solicitud que no gustó nada a la protectora de animales personada en la causa, The Bright Eyes, que también ha decidido recurrir la sentencia para pedir un aumento de la pena.

Este nuevo cruce de recursos, que deberá resolver la Audiencia Provincial, finalmente retrasará el cuidado de los podencos que, por un motivo o por otro, continuarán sin ser rescatados.

Según explicó el representante legal del Ayuntamiento de Sant Josep en esta causa, Javier Mariño, había un acuerdo «verbal» entre las partes para no recurrir la sentencia del juzgado de lo Penal número 1 de Eivissa, que obligaba al internamiento de Sendic. Sin embargo, el propietario de los podencos solicitó a su abogado defensor que presentara este recurso, «que lo único que pide es si puede cumplir la condena en tratamiento ambulatorio en vez de en régimen de internamiento», destacó Mariño.

Al ser informada la protectora de animales, detalló el abogado, también decidió recurrir para pedir «un aumento de pena», mediante un escrito de apelación que aún no ha sido notificado a las partes y que Mariño está esperando para poder «adherirse».

Cabe recordar que el pasado mes de octubre, Bartolomé Marí Ribas Sendic fue sentenciado a un año de internamiento en un centro psiquiátrico después de que la jueza Clara Ramírez de Arellano, considerara que es víctima de un «trastorno obsesivo compulsivo, similar al síndrome de Diógenes, por lo que no pudo ser condenado penalmente a los delitos de maltrato animal, contra la seguridad del tráfico y desobediencia a la autoridad, como pedía la Fiscalía y las acusaciones particulares. Además, la sentencia ya rechaza la posibilidad de que Sendic reciba asistencia ambulatoria al entender que éste pudiera «repetir conductas como las enjuiciadas».

Por último, cabe destacar que sí fue absuelta la mujer del propietario al considerar que estaba completamente desvinculada de las actividades de «crianza» de su marido.

El abogado del Ayuntamiento de Sant Josep, Javier Mariño, explicó que la Audiencia Provincial podría tardar tres meses en responder ambos recursos, por lo que la nueva resolución podría conocerse «en marzo o abril». A esto se suma también el hecho de que las partes están a la espera del recurso de la protectora de animales, The Bright Eyes, al que se sumará también el Ayuntamiento de Sant Josep. Asimismo, cabe recordar que la sentencia del juzgado de lo Penal número 1 de Eivissa, determina que Sendic deberá indemnizar al Ayuntamiento por los gastos que ocasionó la «redada» llevada a cabo en junio de 2007 en la que se capturaron decenas de canes, así como deberá también sufragar los gastos que se originen de la total retirada de los animales.