Cabecera de la marcha pro-vida, en la que figuraba la edil popular de Sant Josep, Encarna Castro. | Irene G.Ruiz

Bajo lemas como «Mamá no me mates», «Su vida está en tus manos, déjale nacer» o «Es un ser vivo, déjale nacer» se manifestaron ayer en Eivissa alrededor de 200 personas contra la Ley del Aborto. La convocatoria, organizada por la ONG Dignidad, consistió en dar dos vueltas al paseo de Vara de Rey y la lectura de un manifiesto en el que se reclamó la derogación de la nueva legislación.
Durante el recorrido, un señor con megáfono iba marcando los cánticos que debían entonar los asistentes. Entre los más coreados: «El aborto es violencia, lo dice hasta la ciencia», «Aborto no, Ibiza y vida sí», «Su vida está en tus manos, déjale vivir», «Escucha, te digo, el feto es un ser vivo» o «Mi madre no ha abortado, por eso estoy aquí».
Entre los asistentes, mujeres y hombres de todas las edades, algunas religiosas y muchos niños. La organización repartió banderitas rojas con el lema de «Derecho a vivir». También había gorros con el lema, aunque se agotaron enseguida. Numerosos asistentes también portaban carteles de confección propia con frases como: «No me dejan entrar en la discoteca pero me dejan abortar» o «Mamá déjame vivir contigo».

Pocos políticos
Entre los asistentes apenas hubo presencia política. Tan sólo la portavoz del PP en el Ayuntamiento Sant Josep, Encarna Castro, que encabezaba la manifestación y que coreó activamente los cánticos. También estuvo presente Paquita Cardona, concejala popular en el mismo Consistorio.
El manifiesto, que fue leído por la profesora de Educación Infantil Ana Varela, pedía la derogación de la Ley del Aborto, que los políticos «promuevan leyes que protejan el derecho a vivir y el derecho a ser madre» y que se respete el derecho de los padres a formar a sus hijos en materia de educación sexual según sus propias convicciones y a la objeción de conciencia del personal sanitario.
Según el manifiesto, 3.000 científicos españoles ratificaron que existe evidencia científica de que desde el momento de la fecundación «comienza una nueva vida humana, con un ADN único e irrepetible». Por eso consideran que el aborto «supone la muerte violenta de un ser humano» y representa un drama «con dos víctimas». Además, creen que «no existe un derecho a matar, sino el derecho a vivir».
Asimismo, recuerdan que la ley no articula ningún recurso para proteger a las mujeres embarazadas. «Se limita a darles licencia para matar al hijo que llevan dentro y las condena a cargar durante toda su vida con esta terrible experiencia». Según recordaron, desde que se legalizó el aborto ya se ha producido un millón en España. «La matanza de 120.000 bebés al año es una tragedia social, son 300 bebés que mueren cada día en el útero de su madre», añaden.
El acto terminó entre aplausos y con una grabación de testimonios de mujeres que decidieron abortar.

«Gracias mamá por no haberme matado»
Durante el acto también subieron varios niños al escenario para agradecer a sus madres por haberles dado la vida. «Quiero dar las gracias a mi mamá porque me salvó» o «estoy contento de que mi madre no me haya matado a pesar de haber tenido otros hijos», fueron algunos de los mensajes que se pudieron oír por boca de estos chicos. La presidenta de Dignidad en Eivissa, Dina Flores, se refirió también a uno de ellos diciendo: «Este niño podría estar muerto ahora y es una joya».
Flores explicó a los medios que consideraban muy positiva la respuesta de la ciudadanía ante la convocatoria, pese a que han tenido poco tiempo para informar a los colectivos interesados. «Hemos enviado información a las iglesias y a las asociaciones», indicó la presidenta, que recordó que su entidad también trabaja con niños de Mozambique.