El president del Govern balear, Francesc Antich, se mostró ayer partidario de que el recorte de los sueldos de los altos cargos del Gobierno propuesto por el presidente Rodríguez Zapatero se extienda a «todos los cargos públicos» de las instituciones autonómica, insulares y municipales de las islas.

«Es lo lógico» cuando se recorta el salario de todos los empleados públicos un 5% de media, manifestó el jefe del Ejecutivo balear que, no obstante, subrayó que el énfasis en esta cuestión responde más al «morbo» que a su efecto real en las arcas públicas y recalcó que tanto los consells insulars como el Govern congelaron el sueldo de sus responsables políticos «hace dos años».

Consell d'Eivissa. Por su parte, el responsable de Finances Corporatives del Consell, Tomás Méndez, consideró «justo» que los cargos políticos de la entidad vean reducidos sus sueldos para contribuir al plan de contención del gasto público ordenado por el Ejecutivo Central. «Estos dos últimos años ya hemos congelado los sueldos a los políticos e, incluso, a los altos cargos en los presupuestos de 2009. Ya veníamos haciendo un plan de ajuste grande pero ahora tendríamos que ser los primeros. No podemos decirle a los funcionarios que deben reducir sus ingresos y no hacerlo a otros, políticos y cargos de confianza, que en definitiva son también trabajadores públicos y que también cobran de los presupuestos». «Esto es como una batalla, no tendría sentido que los capitanes mandaran a los soldados al frente y se quedaran ellos sin dar la cara», añadió. Respecto a la cuantía de la rebaja, Méndez apuntó que el recorte dependerá de lo que estipule el plan de recorte del gasto que se prevé se apruebe el jueves próximo en Consejo de Ministros.

En cuanto a la aplicación de la rebaja a los empleados públicos, el conseller se mostró convencido de que se realizará «de una forma equitativa». «Ahora mismo no sabemos cómo se hará, porque decir que será de un 5% de media es como no decir nada, supongo que afectará más a quién más cobra y menos o nada a quienes cobran menos».

Vila. Fuentes municipales indicaron que el Consistorio está a la espera del documento que se aprobará el próximo viernes en Consejo de Ministros para conocer en profundidad cómo afectarán las medidas de austeridad a nivel municipal. Sin embargo, aseguraron que si así lo reclaman las propuestas de austeridad del Gobierno, «sin duda» serán «los primeros» en aplicar la reducción de los sueldos de sus cargos municipales.

Sant Josep. La concejala de Gobierno, Paquita Ribas, indicó que «a día de hoy no hay suficiente información» sobre las medidas de austeridad y, en concreto, sobre la reducción de los sueldos, tanto a funcionarios como a cargos públicos. «Habría que saber qué ahorro supondría o por qué, y en qué se traduciría, porque el ahorro de un ayuntamiento no va al Estado», destacó la concejala, que remarcó que, de todas formas, en el Ayuntamiento harán «lo que nos digan que tenemos que hacer».

Sant Antoni. El concejal de Interior, Vicente Costa, coincide con el resto de los representantes municipales en que «aún se debe esperar a que el decreto esté vigente» porque, indicó, «nadie sabe a ciencia cierta qué es y hasta donde llega». «Me imagino que nos tendremos que recortar el sueldo, pero tenemos que ver a quién se recortará, si son cargos nacionales, autonómicos o municipales», aseguró el edil, que rechazó una rebaja de sueldo a los cargos municipales «como iniciativa propia» aunque indicó que «si se tiene que hacer, se hará».

Santa Eulària. El alcalde Vicent Marí aseguró que pensaba bajar los sueldos de los políticos municipales «antes de que salieran las medidas» del Gobierno y que esta medida se aplicará de cara a los próximos presupuestos del Ayuntamiento. Asimismo, recordó que el sueldo de los políticos del Consistorio «ya está congelado». «Evidentemente, cualquier medida que se aplique a los trabajadores se aplicará a los políticos en mayor medida», añadió. El primer edil señaló que Santa Eulària «ya está en la senda del rigor y el ahorro presupuestario» y aseguró estar «totalmente de acuerdo con todas las medidas de austeridad que se emprendan». «Hay que dejarlo muy claro: quien no ha hecho los deberes aquí ha sido el Gobierno Central, estuvo negando una crisis y ahora la situación es dramática», concluyó.

Sant Joan. Por su parte, el alcalde de Sant Joan, Antoni Marí Marí Carraca, indicó que las medidas de austeridad propuestas por Zapatero «son una aberración más por parte de un presidente que gobierna totalmente de espaldas a un pueblo». En cuanto a la reducción del sueldo de los cargos municipales, Carraca recordó que ninguno de sus concejales «tiene dedicación exclusiva» y que él, como alcalde, cobra «más o menos» lo acordado por la Federació d'Entitats Locals (Felib). «¿Nosotros qué tenemos que recortar? ¿Y el Ministerio de Igualdad cuánto nos cuesta a los españolitos de a pie?», se quejó el primer edil, que destacó que en Sant Joan «son todos cargos bajos» por lo que tendrán que ser «recortes bajos». «Si no, nos quedaremos sin nada», concluyó.