La recesión económica ha disparado este año la deuda de los abonados de la compañía GESA-Endesa en Balears, hasta los 30 millones de euros, una cifra que representa un crecimiento del 23 por ciento respecto al año anterior, según informó ayer la compañía energética.
La empresa señala que, del total de deuda, 23 millones corresponden a clientes privados, mientras que los siete millones restantes son de las administraciones públicas.
Los impagos del sector público afectan a conselleries del Govern y del Consell y a sus infraestructuras dependientes, como es el caso de colegios, polideportivos u hospitales. También los ayuntamientos deben dinero a la empresa.

Crisis económica
De acuerdo con los datos de la compañía eléctrica, este año se ha mantenido el crecimiento de los impagos de particulares y empresas derivados de la crisis económica.
Por el contrario, la deuda de las administraciones se había reducido el año pasado como consecuencia de las partidas habilitadas por el Govern para pagar a sus proveedores.
Por otra parte, la empresa informó que en estos momentos unos 100.000 clientes de Balears se han acogido al mercado libre eléctrico, frente a los más de 700.000 que permanecen en el sistema de tarifa de último recurso.
Según datos de GESA-Endesa, sólo el 17 por ciento de los clientes de mercado libre ha optado por acogerse a las ofertas que realizan otras compañías. El resto ha decidido mantenerse en la empresa.