El baúl de Pepita (centro) es, sin duda, la estrella de este Taller de Restauración | Arguiñe Escandón

En el aula de la Escola d'Art de Sant Jordi huele a madera y a taller de carpintería. Hay serrín, tablas y, sobre todo, muebles artesanales, como un joyero de pino invadido por la carcoma.

Estamos en el Taller de Restauración de Muebles Antiguos organizado por el Ayuntamiento de Sant Josep y, a los pocos minutos, gracias a las explicaciones de Pep, el profesor, ya se nos hacen familiares términos como 'decapar', 'caja de dotes' o 'pistola de aire comprimido'.

Y junto a él, siete personas que han traído aquellos muebles heredados de sus antepasados para conseguir que 'vuelvan a la vida' en las próximas cincuenta horas.

Entre ellos, hay auténticas joyas, como un baúl en los que el tío del padre de Pepita llevaba la ropa y las camisas hace más de cien años, y que no tiene nada que envidiar al famoso 'baúl de la Piquer'.

Pero también hay sillas, otro baúl un poco más pequeño, una 'caja de dotes de las novias' de otros tiempos o un cabecero de una cama con también más de un siglo de historia detrás. Estos dos últimos, son propiedad del matrimonio de Àngeles y Paco, que han decidido venir juntos, después de que él se revelara como un experto en el tema arreglando una caja de un reloj y una cómoda en cursos pasados. Y es que este trabajo, según algunos «engancha, aunque se quede corto con las cincuenta horas».

Sea como fuere, lo que está claro es que son auténticos artistas con los que no puede ni la carcoma.