El Partido Popular podría alcanzar la barrera de la mayoría absoluta en el Parlament si se celebrasen ahora las elecciones autonómicas, según se desprende de la encuesta de intención de voto que ha realizado el Instituto Balears de Estudios Sociales (IBES) en exclusiva para Ultima Hora. El sondeo atribuye a la formación que lidera José Ramón Bauzá 30 escaños. Su principal oponente, el socialista Francesc Antich lograría aumentar la representación en la Cámara autonómica, pero sería insuficiente para mantenerse en el poder junto con el resto de formaciones de la izquierda.
La previsible victoria de los conservadores, a tenor del sondeo de IBES, se sustentaría en un cambio del mapa político balear respecto a los resultados en elecciones anteriores. El aspecto más significativo es que el avance del PP se produciría de manera notable en la circunscripción de Mallorca, donde podría alcanzar hasta 18 escaños, dos más a los logrados hace cuatro años. Esta dato, de confirmarse, revalidaría el liderazgo de Bauzá dentro de su propia formación puesto que aventajaría a las aportaciones del PP procedentes de Eivissa, feudo tradicional conservador, y Menorca, donde se mantienen los seis escaños.

El efecto Barceló
Uno de los aspectos más novedosos del estudio de IBES es lo que podría denominarse el el 'efecto Barceló' en Menorca, donde su candidatura logra sumar más apoyos que el Partido Popular e incluso superar en número de escaños a los que obtendría Marc Pons en su pugna por el Consell.
Menorca y Formentera son las dos únicas circunscripciones en las que la izquierda mantendría una ventaja electoral sobre los conservadores.
Otro aspecto que contribuye al retroceso de la izquierda es el descalabro que vaticina IBES respecto al PSM, que pierde dos de los cuatro escaños que obtuvo en los comicios de 2007.

Las valoraciones
El IBES también se ha interesado por conocer la valoración que hacen los ciudadanos de los principales líderes políticos. Así, en la lucha que mantienen los candidatos llamados a presidir el próximo Govern, Francesc Antich y José Ramón, del PSOE y PP, respectivamente, se refleja una clara progresión en el grado de conocimiento del líder conservador -aunque todavía a trece puntos del actual president-, que incluso alcanza un aprobado justo, una décima por delante de su oponente, frente al conjunto de los ciudadanos. Sin embargo, Antich gana a Bauzá en la percepción positiva frente a los propios votantes socialistas.

La división de la izquierda tiene un efecto letal para mantener el poder autonómico
La agrupación de 'voto útil' en torno al PSOE que lidera Francesc Antich es insuficiente para frenar el efecto devastador, en términos electorales, que tiene la división de la izquierda. La desaparición del Bloc, con la presentación diferenciada de PSM y Esquerra Unida, acaba suponiendo una pérdida de dos escaños, a los que se sumaría el retroceso de UM. Los comunistas de Manel Carmona no lograrían representación parlamentaria. Al final, la suma de escaños de la izquierda sería insuficiente, incluso con el concurso de las formaciones centristas, para mantener el control del Govern durante los próximos cuatro años tras las elecciones del 22 de mayo.