Pasó en 2009 y el año pasado volvió a suceder. Una de cada dos personas que en los dos últimos años han solicitado ayuda económica a los municipios para cubrir necesidades básicas lo hizo por primera vez en su vida.
La Conselleria d´Afers Socials del Govern puso en marcha en 2009 un plan de ayudas de emergencia que gestionan los ayuntamientos de Balears, que en estos dos años han recibido 2.382 solicitudes de familias y han concedido 2.713 ayudas económicas, ya que cerca de una cuarta parte de las familias reclama ayuda más de una vez. Estas ayudas de emergencia, por tanto, han supuesto para el Govern un gasto de tres millones de euros o lo que es lo mismo unos 4.000 euros al día que han ido a parar a familias necesitadas.
Este plan de emergencia nació con carácter extraordinario y estuvo dotado inicialmente con 1.045.000 euros. Con él se pretendía atender de una forma ágil las demandas urgentes de personas que por culpa de la crisis económica se habían quedado sin ingresos o los habían reducido considerablemente. Esta situación afectó y aún afecta a personas «normalizadas» que hasta este momento nunca habían tenido que recurrir a los servicios sociales o bien eran usuarias de manera ocasional. Ese dinero se acabó ese mismo año y la Conselleria ha ido ampliando el presupuesto a medida que crecían las necesidades, siempre en la medida de las posibilidades presupuestarias, pues «este año nos encontramos en una situación de prórroga presupuestaria», recordó la consellera d´Afers Socials, Fina Santiago.
Hasta ahora, por tanto, se han beneficiado 2.382 familias. Concretamente el 52,1% en 2009 y el 47,5% en 2010 de los expedientes familiares tramitados se abrieron por primera vez en los servicios sociales de los ayuntamientos. Son las personas que nunca antes habían tenido que recurrir a esta vía.
La causa principal de percepción de la ayuda es, en el 59% de los casos, haber perdido el trabajo; en el 36% de las situaciones es una reducción en la percepción de prestaciones públicas, y el resto, por falta de ingresos.
Otro dato indica que en la mayoría de casos, el 63%, es una mujer la que acude a solicitar la ayuda, mientras que sólo un 27% son hombres. Los hogares formados por una sola persona adulta con menores a su cargo representan el 38% de las familias beneficiarias. Es decir, son hogares monoparentales. En el 26 por ciento de los casos son hogares compuestos por tres personas; otro 26 por ciento, por cuatro personas; en el 21 por ciento, por dos personas y en el 7 por ciento, por una sola persona.

Más de cinco millones en tres años parLas unidades familiares que no tienen ningún tipo de ingreso pueden solicitar, además, al Govern la Renta Mínima de Inserció (RMI), que en los últimos años ha ido duplicado sus beneficiarios y ya supera los 2.000.
La consellera d´Afers Socials recordó que entre los años 2004 y 2007 se destinaron a esta ayuda unos 2,5 millones de euros y a partir del inicio de la crisis, en 2008, se tuvo que aumentar de forma considerable la partida económica. Así entre los años 2008 y 2010 se han aportado 5,2 millones de euros más. La renta mínima son 428 euros mensuales y va subiendo en función del número de miembros de la familia.
a la RMI

¿Qué pasará este año?
Las ayudas para el año 2011 dependerán de las solicitudes que se reciban en los diversos municipios. La Conselleria d´Afers Socials confía en que con la mejora de la situación económica y del sector turístico en las Islas se evidencie una reducción de la demanda. En cualquier caso, la consellera recordó que «nos encontramos en situación de prórroga presupuestaria». Los trabajadores sociales de cada municipio son los que evalúan cada caso y deciden si una familia recibe la ayuda una o más veces.