Todos los sindicatos representantes de la Junta de Personal docente no Universitario exigieron ayer «la ejecución urgente de las infraestructuras educativas pendientes en Eivissa» debido a que, según denuncian, «la falta de estas instalaciones perjudica gravemente la calidad de la enseñanza que recibe el alumnado, así como las condiciones laborales de los trabajadores y las trabajadoras».
Así reza parte del escrito que enviarán a la Conselleria d'Educació de forma conjunta los sindicatos Anpe Balears, Federació d'Ensenyament de Comisiones Obreras, UGT, y STEI-i Pitiüses. Un documento en el que exigen la construcción de cuatro centros de educación secundaria en Santa Eulària, Sant Carles-Es Canar, Sant Jordi de ses Salines y Vila, así como la conclusión de las obras del IES Sa Serra. La edificación también de los colegios de Sant Antoni, Es Pratet, así como edificios para las escuelas de adultos de Sant Antoni y Vila; una sede propia para la escuela de idiomas y el desdoblamiento del colegio Can Cantó.
Los representantes sindicales se reunieron ayer frente a las obras paralizadas del IES Sant Antoni, para denunciar este «retraso histórico y acumulado en el tiempo». «Teníamos mucha esperanza de que en esta legislatura las cosas se solucionaran. Se hicieron algunas actuaciones loables, pero este retraso histórico se ha perpetuado también en esta legislatura», indicó Antoni Joan, de Comisiones Obreras, quien destacó que todas estas infraestructuras «son, en este momento, absolutamente urgentes» y reclamó que «se hagan de manera rápida porque si no se puede producir un colapso educativo y social».
Por su parte, Joana Tur Planells, del STEI-i Pitiüses, indicó que en los últimos cuatro años «solo se han hecho reparaciones y ningún centro nuevo». «Aquí siempre estamos de segunda mano, de prestado. Y pensamos que la gente de aquí no debe estar de prestado, debe estar dignamente dentro de unas aulas, con ratios como toca y con unos espacios con todo lo que hace falta», concluyó.
En Vila también habrá masificación
Los representantes sindicales indican que la situación de masificación que puede padecer Santa Eulària, de aquí a dos años, también puede llegar a Vila. Por ello, quieren un compromiso de todos los partidos políticos para que se solucione esta deficiencia, más allá de quien gobierne. Asimismo, recuerdan que las aulas modulares «no son escuelas en condiciones, y que la situación del Quartó de Portmany es vergonzosa». «Hemos tenido autopistas, proyectos de ampliación de puerto, pero no tienen interés en la educación», criticó Joana Tur Planells, del STEI-i Pitiüses.
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