Antonio Sepúlveda ante la vitrina de la asociación en la que guardan todos los reconocimientos recibidos. | Marco Torres

Creada hace 44 años, la Asociación de Donantes de Sangre de Eivissa y Formentera es la más decana de Balears y una de las más antiguas de España. La agrupación ha sido galardonada en la primera convocatoria de los Premios al Mérito Ciudadano que el Consell de Eivissa entregará el próximo 12 de mayo.
Antonio Sepúlveda es socio fundador de la asociación, formó parte de la directiva como tesorero, después fue vicepresidente y desde hace diez años preside la institución. «La agrupación nació porque en 1967 en Eivissa, como en otros sitios, había una demanda de sangre. Lo que sucedió aquí de especial es que nos juntamos un grupo de personas dispuestos a crear la asociación y así lo hicimos», relata Sepúlveda.
Fueron Paco Bonet Redolat, Enrique Mayans y Vicente Bonet Redolat los que decidieron arrancar este proyecto. «Desde el momento de su fundación, se iniciaron las campañas de captación de donantes que se han ido sucediendo a lo largo del tiempo, para ir cubriendo las necesidades de sangre de los distintos centros sanitarios de la isla», apunta Sepúlveda.
Lo que ha ido cambiando de un modo especial ha sido el modo de realizar las donaciones: inicialmente los donantes acudían a las clínicas en el mismo momento en que su donación era necesaria.
«La mayoría de las veces íbamos a donar a las clínicas, pero también íbamos a domicilios particulares, donde nos ocurrían cosas curiosas». Una anécdota graciosa, relata Sepúlveda, se produjo cuando él mismo fue con Paco Boned a donar sangre a casa de una señora. «La mujer, lo primero que me preguntó fue si era ibicenco el que le iba a dar la sangre. Paco Boned enseguida me dijo: cállate y no digas ni una palabra. Finalmente le di sangre y la cosa no fue mal».
Fue a partir de 1974 cuando se hizo necesario contar con un local para realizar las extracciones periódicas y conservar la sangre en los frigoríficos especiales hasta el momento de su utilización, «lo que se ha seguido haciendo hasta la fecha».

Sin dinero y sin sangre
La Asociación de Donantes de Sangre de Eivissa y Formentera ha atravesado a lo largo de su existencia por verdaderas crisis, principalmente económicas, que hicieron peligrar su continuidad y que, «afortunadamente, fueron superadas nada más que por la voluntad de servicio de sus asociados que además de donar sangre contribuían económicamente al sostenimiento de la asociación».
En este sentido, Antonio Sepúlveda reconoce que él fue uno de los que se pronunciaron en contra de esta medida. «Bastante era la colaboración que aportaban los socios poniendo el brazo, como para que además tuvieran que aportar dinero. Lo hicieron en momentos muy críticos y anualmente, pero era muy injusto y decidimos prescindir de ello», sentencia.
Dos de las fechas más destacadas para el presidente de la organización fueron 1992, cuando se iniciaron las extracciones en Sant Antoni, Sant Josep y Santa Eulària y 1999, momento en el que comenzaron las extracciones en Formentera.
En el transcurso de estos años y hasta el momento, los socios de esta galardonada asociación han aportado 89.100 donaciones altruistas de sangre, unos 45.000 litros de sangre, demostrando, de este modo, su fidelidad y constancia de manera desinteresada. Sepúlveda añade a estos datos, no sin cierto orgullo, que «la organización ha cubierto la totalidad de las necesidades hematológicas de las islas de Eivissa y Formentera donde, no nos consta que se hayan tenido que suspender o aplazar, en ningún momento, intervenciones quirúrgicas por falta de sangre».
Para el presidente de esta asociación, lo que de verdad sería un suceso es que se produjese un accidente y no hubiese sangre para esa emergencia. «Precisamente el banco de sangre existe a estos efectos, para almacenarla y tenerla disponible cuando se necesite».
Sepúlveda considera que «lo que se ha premiado es el mérito a los ciudadanos anónimos que se proponen y se mentalizan de que tienen que ayudar y lo hacen sin ninguna gratificación o beneficio a cambio de esas donaciones».

Una asociación distinguida con diferentes reconocimientos
La vitrina de la Asociación de Donantes de Sangre de Eivissa y Formentera puede presumir de contar con numerosos reconocimientos. Comenzaron a llegar los galardones en 1975 con el Diploma de gratitud de la Asamblea Suprema de la Cruz Roja Española. Enre los más destacados cuentan con la Medalla de Oro de las Illes Balears, o la Medalla de Oro del Ayuntamiento de Eivissa. En 1999 la asociación se hizo eon el Diploma de la Federación Nacional de Donantes de Sangre por la ejemplar aportación a la donación altruista de sangre en España en el 32º aniversario de la Asociación.
El Premio al Mérito Ciudadano que le otorgará el Consell de Eivissa el próximo 12 de mayo en el Palacio de Congresos de Eivissa supondrá el noveno premio. En esta ocasión será una escultua reproducida en bronce de Jesús Àngel Rodríguez y Antonio Carruesco. La obra simboliza la unión de los cinco municipios de Eivissa.