Javier Pérez Pont, junto a Ivana Risianova, su anfitriona en su visita a Eivissa. | ROCIO MARTINEZ

Javier Pérez Pont, una de las grandes figuras en el mundo del Pilates en España, ofreció ayer por la noche una conferencia y una pequeña clase magistral sobre este método en The One Ibiza Hotel.

No fue un encuentro cualquiera ya que los que pudieron asistir conocieron de primera mano el método original, creado a principios del siglo XX por el alemán Joseph Hubertus Pilates, basándose en su conocimiento de distintas especialidades como gimnasia, traumatología y yoga.

De todo eso sabe muchísimo este exbailarín profesional que estuvo tres años aprendiendo y dando clase en Nueva York junto a las maestras Romana Kryzanowska y Sari Mejía Santo, alumnas a su vez del legendario profesor.

Después regresó a España y puso en marcha en el año 1999 en Barcelona el primer estudio que impartía este método en nuestro país. Desde entonces no ha parado convirtiéndose en una de las voces más autorizadas para hablar sobre este tema.

Mucha confusión

Por eso hay que tenerle en cuenta cuando afirma que «hay mucha confusión en este mundo ya que hoy se llama Pilates a cualquier cosa». Y es que Javier asegura que «cuándo me he acercado a lugares donde se impartía me he dado cuenta que no se parece en nada de lo que yo aprendí en Nueva York».

Tal es así que el profesor asegura que «en muchos lugares imparten cualquier cosa menos Pilates porque no reconozco los ejercicios que se imparten allí y cuando hay alguno que es parecido me sorprende incluso cómo se aplica».

En este sentido, para este exbailarín profesional es como «si uno coge una sinfonía de Bethoven y le hace variaciones y se inspira en ello, la partitura seguirá siendo la partitura y lo que tu hagas de nuevas una variación».
Pero sea lo que sea lo que se imparte en los distintos sitios, lo cierto es que el método Pilates engancha a a la gente, aunque sea, como afirma en broma Javier, porque «la palabra es mágica, y sólo el pronunciarla hace que la gente se encuentre mejor».

Beneficios

Más allá de todo esto el método proporciona múltiples beneficios ya que según los expertos «principalmente te hace sentirte bien con uno mismo». En este sentido, según Javier, también ayuda a mejorar tus relaciones con los demás, ya que «si a ti te deja de doler algo o dejas atrás tus problemas, conseguirás también estar bien con los demás».

Algo que ha experimentado en sus propias carnes Javier, que asegura que su primer contacto con este mundo no pudo ser más negativo: «Cuando mi esposa y yo eramos bailarines en Holanda, ella tuvo un problema con un dedo y como necesitaba recuperarse rápidamente para una cita que teníamos decidimos recurrir a él, pero cuando lo vi por primera vez me pareció muy difícil y agobiante».

Afortunadamente para todos sus alumnos ante la insistencia de su mujer y su profesora decidió probar y «el primer día no me gustó aunque si he de decir que me sentí mejor... y desde ahí... terminé enganchado a los tres días y desde entonces, he consagrado mi vida a este método que te cambia la vida».