La concejala de Limpieza y Medio Ambiente de Sant Antoni, Lidia Prats, anunció ayer el inicio de un plan integral de limpieza, cuyo primer paso será «marcar muy de cerca» a la contrata FCC (Fomento de Construcciones y Contratas), a la que le quedan los últimos tres años de una década de gestión y que cuesta al municipio 275.000 euros al mes.

La edil visitó a las siete de la mañana las calles del West End, acompañada por Nicolau Canyelles, responsable de FCC en Balears y Manuel Hernández, jefe de la empresa en la isla, y también por los medios de comunicación. El objetivo era constatar el estado de suciedad en el que queda por las mañanas la principal zona de ocio nocturno de Sant Antoni y cuánto se tarda en limpiarla.

Según informó la edil, en las calles Santa Agnès y alrededores, en 25 minutos, «ya se veía una diferencia abismal» como consecuencia del trabajo de cuatro personas y de una máquina barredora. «Nuestro objetivo es que las calles queden limpias para las nueve de la mañana», destacó.

Más operarios

Este inicio del plan cuenta con 65 trabajadores de la empresa y otros 34 contratados por seis meses por el Ayuntamiento con una subvención del Servei d'Ocupació de les Illes Balears (SOIB), en el marco del proyecto 'Sant Antoni limpio las 24 horas'.

Los mismos, se repartirán por todo el municipio, dividido en ocho zonas de actuación con motivo de la nueva reorganización del servicio llevado a cabo entre FCC y el Consistorio. Asimismo, Prats indicó que también se ha ampliado el horario para que haya operarios trabajando mañana, tarde y festivos.

En cuanto al estado de suciedad en el que amanece el West End, la edil aseguró que «es la realidad de una zona de ocio importante». «Es lo que hay y es lo que estamos trabajando. Desde que empezamos está limpio en la mitad de tiempo», agregó.

La segunda parte del plan será la concienciación

Lidia Prats explicó que este es un primer paso en el plan integral de limpieza, cuya segunda parte será la implicación de la ciudadanía.

Asimismo, destacó que continuará visitando diferentes zonas del municipio «para comprobar que la contrata está cumpliendo la función que toca». «La relación es muy buena pero los vamos a marcar muy de cerca, porque no quiero que haya maquinaria que no funciona, camiones que tienen problemas o que no esté todo el personal que toca», insistió.