Mañana se cumplirá un año desde que un particular entrara en el registro del Consell de Formentera una denuncia contra Formentera Mar por estar alquilando como apartamentos turísticos 16 camarotes del Edificio A de su concesión administrativa autorizada por la Autoritat Portuària de Balears.
La denuncia presentada ante la primera institución de la isla solicitaba «el cierre y precinto del Edificio A y el inicio del correspondiente expediente sancionador». Sin embargo desde el Consell se señala que se está ultimando el expediente.
La concesión de Formentera Mar fue acordada por el Consejo de Administración de Ports de Balears el 24 de junio de 1993, por lo que en ese momento la actividad ya estaba prohibida por las leyes y regulaciones anteriores. En la denuncia se aportan diversas pruebas de la explotación comercial desde sus inicios, con la denominación 'La Marina' como si de apartamentos se tratara, facilitando la estancia y alojamiento a turistas sin limitación alguna.
En este sentido la parte denunciante subraya que «se trata de una actividad absolutamente ilegal, que no viene legitimada por el título concesional, que viene expresamente prohibida por la normativa estatal sobre puertos y costas, y para la que además, y en cualquier caso, la sociedad Formentera Mar SA carece de las correspondientes licencias y autorizaciones por parte de la Conselleria de Turisme, por lo que estamos ante una actividad totalmente clandestina que la sociedad viene llevando a cabo desde los mismos orígenes de la concesión».
Por si fuera poco la denuncia hacía hincapié el pasado verano en que «dichos apartamentos son comercializados por Formentera Mar SA para la celebración de bodas y eventos, ofreciendo el alojamiento en los apartamentos La Marina como parte integrante de un servicio integral que la sociedad ofrece y comercializa a un destino absolutamente ajeno a la actividad portuaria a la que debe destinarse el Edificio A».
Por último, la parte denunciante adjuntaba un informe redactado por el detective privado Antonio García Agudo «en el que de forma contundente se acredita cómo la sociedad Formentera Mar SA destina dichos apartamentos a fines turísticos con independencia de la procedencia del usuario, siendo que cualquier persona puede hospedarse en dichos apartamentos por días o semanas abonando su precio». Lo que en sí mismo y según la parte denunciante «constituye una infracción muy grave en materia de Turismo al carecer de toda licencia o autorización».