El nuevo gerente del Àrea de Salud de las Pitiüses posa frente a las obras del nuevo hospital de Can Misses. | Marco Torres

Ignasi Casas Ollé (Barcelona, 1969) cuenta con la peculiaridad de que es el primer gerente del Àrea de Salud de Eivissa y Formentera que no es médico de profesión pero conoce el Àrea de Salud porque lleva trabajando aquí desde 1995. Hizo estudios de Física y cuenta con un master en dirección y gestión de empresas, trabajó en Bolsa una temporada hasta que se trasladó a Eivissa donde fue jefe del Àrea Económica y después fue director de gestión en dos legislaturas con Nacho Martínez, Francisco Cárceles y Julio Villar hasta octubre de 2010. Hasta su nombramiento hace escasamente un mes ha sido jefe de compras del Àrea de Salud.

-¿Cómo se ha encontrado la Gerencia en el tema económico?
-En la sanidad siempre hemos sufrido de alguna manera que el gasto iba con un crecimiento superior al presupuestario y, particularmente, este año con la restricción presupuestaria todavía va a ser más complicado. Además, se han hecho unos gastos anteriores en temas de plantilla bastante elevados de dos millones en un año y medio.

-¿No era necesario ese gasto en plantilla?
-La cuestión es que en un entorno de restricción presupuestaria seguramente se pueden posponer muchos de ellos, se han de planificar mejor o priorizar mucho más.

-¿Qué pasará con ese personal?
-Los compromisos no son de la persona sino de la Gerencia y, por lo tanto, los asumo con todo lo que hay y a partir de aquí hemos de gestionar. Cuando estuve hicimos un gasto en maxilofacial que está totalmente justificado y sacamos dinero de donde se pudo. ¿Era necesario? En el momento en el que se rompe un concierto era necesario.

-¿Piensa recuperar los conciertos?
-Hay un servicio de cirugía maxilofacial que no lo voy a desmontar y un sistema de neurocirugía que si funciona hay que protegerlo y potenciarlo. Otra cosa es que sea necesario un concierto para complementarlo, pues si es necesario se hace. La línea es de continuidad y trabajando en lo que se está haciendo. He estado aquí y hay cosas que me gustan y otras no, pero es el Àrea de Salud la que trabaja, todo el mundo.

-Desde que tomó posesión ha tenido reuniones con los jefes de servicio del hospital y los coordinadores de primaria a los que les ha pedido que le informen donde se puede recortar. ¿Qué le han dicho?
-Hay gente que rápidamente dedice dónde se puede hacer y otros se despistan, como todos. Quien tiene conocimiento es la gente, que sabe dónde puede mejorar su servicio y dónde ahorrar. Igual que hay propuestas de mejora de cartera de servicios para el nuevo hospital. Lo que estamos haciendo es ser más serios en el tema de los recursos, fijarse un poco más. Los profesionales saben donde se puede dar un apretón más, en material, en personal, todo un poco.

-¿Dónde le ha dicho la consellera Carmen Castro que tiene que recortar?
-Nadie me ha dicho nada, excepto en los cargos directivos en los que hemos hecho un recorte. De momento no me han dicho nada, ahora se están situando. Lo que he transmitido a los profesionales es que yo no quiero que me recorten o 'me obliguen a' sino que en Eivissa y Formentera creemos que lo que podemos hacer para mejorar es lo que estamos haciendo. Estamos haciendo un esfuerzo porque hemos cerrado una planta que estaba previsto. Es una decisión bien tomada y bien pensada. Se cerró el 18 de julio al poco de tiempo de empezar yo. También se han cerrado unos quirófanos. Intentamos ser más eficientes y parece que funciona, que no hay problema de camas.

-¿No tienen problemas con los ingresos porque Can Misses está saturado?
-En verano cambia la actividad. Hay menos actividad quirúrgica, menos ingresos y se tienen más urgencias. El cierre es una medida casi típica del Àrea de Salud. En principio se ha cerrado una planta no diré cada año pero más de una vez. En Navidad del año pasado cerramos una planta.

-¿Dónde se puede recortar?
-Haciendo lo que estamos haciendo, pero mejor. Hemos de mirar si el rendimiento quirúrgico es el adecuado; si el volumen de intervenciones deriva en peonadas, horas extras remuneradas o la gestión de camas. El sistema tiene suficientes recursos para ahorrar, recurrir a la unidad a hospitalización a domicilio, que el especialista no vea tanta gente y confíe más en primaria.

-¿Plantearía reducir peonadas o guardias localizadas?
-Las peonadas, de entrada, están paradas. Las sustituciones, la planta tercera y también hemos acortado algún refuerzo. ¿Qué es necesario más? Quiero tener un papel consensuado con los servicios que digan dónde se puede ir apretando más.

-¿No sería conveniente establecer un sistema de pago para extranjeros?
-El sistema de pago está muy claro. Aquí se pegó un achuchón en los años 2009 y 2010 en los que se pasó de facturar menos de un millón de euros a un millón y medio. Por convenios, facturamos un 1,5 millones de euros más. El Àrea de Salud saca tres millones de pagos a terceros. Siempre que hay alguien que ha de pagar, paga.

-¿Cómo va a ser el organigrama de cargos que plantea?
-Mantener lo que tenemos hasta ahora y potenciando a la gente. Lo importante es estar en la mesa de las decisiones. En Formentera va a haber un director, había tres cargos directivos y queda uno. He propuesto que este puesto dependa de Eivissa, pero que lo nombre la consellera. La dependencia con Eivissa y Formentera existe y la cuestión es que si hay una discusión tenga Formentera suficiente peso y relevancia para no estar en vasallaje con Eivissa, que tenga una voz independiente.

-¿Se ha nombrado ya al director de Formentera?
-No, los cargos no se nombran hasta el 1 de septiembre. La gente continuará hasta el 31 de agosto.

-¿Y el médico de primaria José González que cargo va a ocupar?
-Mi idea es incorporarlo como coordinador asistencial, ayudando al gerente para coordinar los diferentes dispositivos.

-¿Al no ser usted médico no cree que puede primar más la gestión que la atención al paciente?
-O al contrario porque no tengo la visión médica sino de usuario de la sanidad. Tiene su parte positiva y es que en los temas de gestión al final llegas a un detalle, al conocimiento clínico, asistencial y sanitario, que yo tengo muy claro que no lo tengo y he de contar con los que lo sí lo tienen.

-Pero sí que tiene más habilidad para saber donde se puede recortar.
-Tengo muy claro donde se puede intentar apretar más o menos pero el apretón real lo tiene el sanitario. Le puedes decir que se han de gestionar las camas, pero hay que ir al detalle.

-¿Hay proyectos que queden aplazados por esta situación?
-El proyecto del nuevo hospital es el más importante y va a ser imparable. Hay un impass en la recepción. Hay que plantearlo de una manera seria y tirarlo para adelante. Que la coyuntura de hoy no rompa lo que ha de ser para 30 años.

-¿Hay fecha de entrega del bloque de consultas externas?
-Todavía no, igual se replantea y no hay entrega de este hito. Tal y como estaba proyectada la obra, tenían que estar dentro del hospital trabajando, en consultas, y eso es una locura. La idea inicial era trasladar las consultas externas y hay gente que puede pasar y otros que lo ven muy difícil. Aquí estaba previsto romper, hacer ruido, con el laboratorio y los quirófanos arriba. Las reformas en hospitales son muy difíciles por tema de bioseguridad, cruces de pacientes y esto se ha de replantear.

-¿Y ese replanteo pasa por esperar a que todo esté terminado para hacer el traslado?
-Son opiniones. Para mí lo más cómodo es que se acabe el nuevo hospital, traspasar lo que hay aquí al nuevo y se reforme éste.

-Es decir que se retrase un año.
-La idea inicial era entregar ahora el edificio de consultas, en mayo se entrega el centro de salud de Can Misses y dentro de un año, el nuevo hospital, pero creo que hay algo retraso. Veo más cómodo para nosotros trasladarnos dentro de un año. Me preocupa por el tema de bioseguridad que se esté haciendo obra aquí dentro.

-¿Cree qué se puede aguantar aquí un año?
-Sí.

-¿Esa es su opinión, la de los profesionales o Palma, porque la Conselleria puede opinar lo contrario?
-Palma está mirando qué hacer. Había gente dispuesta al traslado y otra que veía inconvenientes. Los que están más cerca del proyecto ven que entrar a hacer obra aquí será una incomodidad, a parte de riesgos y de la incertidumbre que puede generar.

-¿Y la radioterapia?
-Hay una reserva hecha y en el momento que se empiece a hablar de los planes de dotación se tendrá que mirar.Lo importante no es tanto la reserva sino lo que vendrá después.

-¿El búnker?
-El búnker, qué máquina se pone, quien se va a encargar. Es un tema bastante delicado. El servicio de referencia está en Son Espases.

-¿Cuándo empiece a funcionar el nuevo hospital estará la radioterapia?
-¿El nuevo hospital dentro de un año? Lo veo precipitado. Cuando esté hecha toda la obra, como mínimo espero que esté planteada, que tenga la hoja de ruta que se ha de seguir. Los temas de radioterapia son los más delicados, por la maquinaria que tiene y los requisitos de seguridad.

-¿No cree que el retraso puede chocar con los intereses del partido ya que la intención era que estuviera con el nuevo hospital?
-El espacio está y entiendo que hay una voluntad política, que se ha de trasladar a los papeles. No creo que lo que nadie crea es que la voluntad política haga acelerar las cosas para no hacerlas bien. Creo que esto no pasará. No podemos dedicar todos los recursos a mirar lo que hacemos con la radioterapia, estamos abriendo un nuevo hospital y hay que dotarlo.

-Cuando se planteó el nuevo hospital usted era director de Gestión ¿Cuál era su opinión sobre implantar la radioterapia?
-A mí ni se me planteó, me dijeron que se hacía y ya está. Nadie me preguntó, colaboré en buscar el sitio. En el momento de escoger el proyecto del hospital, me parece que en la votación había 15 personas y sólo tres o cuatro de Eivissa.

-¿Le ha pedido más autonomía a Castro?

-Lo que he pedido es participar como Àrea de Salud en el nuevo hospital. No puede ser que una nueva infraestructura se haga de espaldas a los profesionales, que significa modificaciones pues lo siento pero, como mínimo, nos han de escuchar y si no puede ser se ha de razonar y explicar. Esta infraestructura la van a utilizar la gente de aquí. Que tengan muy claro que el hospital es para Eivissa y Formentera. La experiencia de Son Espases no ha sido muy buena.


PRIVATIZACIÓN


-¿Y el personal no le transmitido su preocupación por el tema del recorte?

-El personal sabe que la situación es mala y cada uno tiene su nivel de preocupación, qué pasa con su contrato o si van a cobrar los incentivos.
-En el Plan de Saneamiento de Bauzá se contempla privatizar la sanidad.
-Para mí lo peor de estas cosas son los tumbos que damos porque hace cuatro días se ha estatutarizado a todo el personal de las fundaciones y ahora se vuelve a hablar el tema. Creo que debería de haber un consenso, una línea génerica.

-Perdone, pero los tumbos los da el Govern.
-Lo que digo es que en sanidad no ha habido un modelo muy claro, porque el mismo que puso las fundaciones las estatutarizó al día siguiente. Aquí se ha hecho una apuesta que es una concesión y se traspasaron servicios con personal estatutario. La concesión se ha hecho para nuevos hospitales.

-¿Qué servicios van a traspasar? ¿Perderán derechos?
-Servicios generales, como cocina y limpieza. Ese personal no dejará de ser estatutario.

-¿Y la propuesta de reducir urgencias en primaria?
-Los SUAPs son imprescindibles. Puede tener el sentido en Mallorca pero aquí no creo.

-¿Y el recorte de especialistas de Mallorca a Eivissa?
-Cuando alguién recorta se ha de tener muy claro lo que se va a perder. Tal vez es mejor recortar una guardia localizada que un especialista que viene de Palma. Desde hace mucho tiempo viene ortopedía infantil y no me cabe en la cabeza que se recorte.