Educació ya dispone del proyecto modificado de Sa Bodega, pero falta aún el visto bueno del Ibisec

La Conselleria d'Educació del Govern cuenta ya con el proyecto modificado del nuevo colegio de Sa Bodega pero falta toda una serie de trámites administrativos para que el futuro colegio del municipio de Eivissa salga adelante ya que las obras están paralizadas desde marzo por la aparición de restos arqueológicos. De hecho, se está pendiente de la supervisión por parte del Institut Balear de Infraestructuras Educativas (Ibisec) del proyecto modificado. El Ayuntamiento de Eivissa, por su parte, también está a la espera del Ibisec.
Este no será el único trámite previsto para dar luz verde a las obras ya que depende de las entidades afectadas por esta paralización: el Ayuntamiento de Eivissa y la Conselleria d'Educació, ya que se necesita la tramitación de una modificación del convenio firmado, a través de una cesión de crédito, en el que se recoja la financiación del mayor coste de estos cambios. Una vez superado este paso se ha de tramitar el expediente por lo que este proyecto se podría llegar a ralentizar más de lo inicialmente previsto.
La Conselleria d'Educació asegura que las modificaciones del proyecto superan las previsiones inicialmente realizadas por los arqueólogos a pie de obra. Las modificaciones contemplan una revisión del sistema de cimentación que afectará a la distribución baja del edificio. Además, la Comisión de Patrimonio «obliga a que los restos sean visitables con la consiguiente complicación que comporta el uso del centro».
La contratación de las obras de este colegio fue a través de un sistema de cesión de crédito mediante el que son financiadas por el Govern aunque las contrata el Ayuntamiento de Eivissa. El Ibisec aporta el soporte técnico -administrativo y jurídico necesario, esencialmente la supervisión de los proyectos y de la obra. Sa Bodega fue adjudicada a la empresa Vías y Conducciones y en octubre del año pasado se firmó el contrato de las obras cuyo presupuesto inicial era de 2,7 millones y con un plazo de ejecución de doce meses.
A finales de noviembre de 2010 se iniciaron las obras de construcción del colegio y pocos días después aparecieron los restos arqueológicos aunque las obras siguieron pero finalmente se suspenden de manera parcial y, posteriormente, de modo total el 10 de marzo, realizándose informes técnicos que se remiten a la Ciothupa. Tras el informe de Patrimoni está en manos de Educació.