El pasacalles de Space, que imitó el estilo de los espectáculos de 'burlesque', se llenó de corsés, abanicos y plumas en tonos morados.

La fantasía y el color definen a diario las noches ibicencas, en las cuales las discotecas tienen un papel fundamental. Para dar a conocer sus fiestas, los clubes organizan originales pasacalles que recorren el puerto de Eivissa ante la mirada curiosa de los que, por casualidad o no, se encuentran ahí presentes.

A pesar de que ya no se encuentren multitudes tan voluminosas como las de otros años, el puerto sigue acogiendo cada noche a gran cantidad de turistas y residentes que se acercan a la zona para tomar algo. Estas personas se convierten en el público principal de los pasacalles, que inician sus recorridos poco antes de media noche y terminan sus paseos en las callejuelas de la Marina profunda. Es fácil observar a niños y mayores boquiabiertos con los trajes de los bailarines, a quienes no paran de sacar fotos aprovechando las distintas paradas que éstos van realizando para saludar a su público y tomarse algún chupito.

Estilos diferentes

La noche del pasado miércoles gogós y drag queens de Space, Amnesia, Privilege y Pachá se enfundaron sus mejores trajes y tacones para promocionar cada uno de los eventos, de muy distinto estilo, que se celebraba esa misma madrugada en las correspondientes discotecas. Muchos fueron los turistas que se quedaron asombrados al ver aparecer a los bailarines de Space, que organizó el primero de los pasacalles de la noche, subidos a sus altísimos zancos y tacones que evitaban que pasasen desapercibidos.

El tema de la noche fue el ambiente burlesque que quedaba reflejado en los corsés de las gogós, que lucían vistosas plumas y pelucas en la cabeza, a juego con sus cortas faldas de tul. Las puntillas, las medias de rejilla, las perlas y los abanicos completaban el atuendo.

No menos artificiosos fueron los atuendos de Amnesia, que promocionaba la exitosa fiesta de La Troya, que en esta ocasión tenía como tónica la cárcel. Los bailarines se repartían entre policías y ladrones, por lo que las rayas blanquinegras, las esposas y las cadenas se presentaban como lo más impactante de este desfile. Aun así, también hubo quien prefirió los trajes rojos, siempre sensuales, y hasta incluso quien se inspiró en el estilo de Lady Gaga, con largas pelucas rubias repletas de latas que imitaban rulos.

Por su parte, los pasacalles de Privilege y Pachá aparecieron en último lugar y captaron la atención del público tanto como sus competidores, a pesar de que presentaron espectáculos con un número más reducido de participantes.

Mientras que los de Privilege se inspiraron en los espectáculos de vedettes, llenando su actuación de vistosas plumas y pezoneras moradas y blancas y maquillajes dorados; las gogós de Pachá optaron por un estilo sofisticado, acorde con las 'Subliminal Sessions' de Erik Morillo, enfundadas en ajustados bodies negros que relucían sobre sus tacones de infarto, mientras hacían girar sus elegantes bastones.