Joan Guasch, de 13 años y el miembro más joven de la banda municipal de Santa Eulària, muy concentrado durante el recital. | MARTA MARTIN

Más de 250 niños de la escuela de verano Santa Eulària asistieron ayer en el colegio Vénda d'Arabí a un concierto muy especial, pues hubo desde pasadobles hasta la sintonía de los conocidísmos Simpsons. «Va dirigido a niños que tengan entre seis y doce años para motivarles y aficionarles a la música, además de presentar los cursos que tenemos en la escuela municipal de música. Tenemos iniciación para pequeños de seis y siete años y clases para adultos. Entre estos dos tramos hay clases a partir de ocho años de instrumentos como la flauta, el clarinete, saxo, trompeta, trompa, trombón, tuba y piano en el centro cultural de Puig d'en Valls», explicó Juan Manuel, director de la escuela municipal de música de Santa Eulària. Cuando los pequeños empiezan las clases pueden formar parte de la banda juvenil y, más tarde, de la municipal.

Una vez los monitores y monitoras de esta escuela de verano sentaron con mucha paciencia a los pequeños, la banda de metal se preparaba para la actuación. Entre ellos, el pequeño Joan Guasch, de tan sólo 13 años. «No estoy nervioso; el público mayor es peor que el infantil», puntualizó Joan. Los asistentes guardaron silencio para que la banda empezara la actuación. Y entonces sonaron los primeros acordes del pasodoble El Gato Montañés, muy seguido con palmadas por monitores y alumnos. Más tarde sonó la banda sonora de La pantera rosa y Los Simpson. Entre canción y canción, Vicent Tur, profesor de trombón de la escuela, explicaba a los pequeños detalles musicales. Al acabar el concierto, muchos de los pequeños continuaban tarareando las canciones.