Esquerra Unida (EU) propuso ayer una reforma en profundidad del Senado para que vuelva a ser una cámara de representación territorial, donde las comunidades autónomas «tengan voz propia» y no la del «partido que gobierna», de forma que sirva de contrapeso a las decisiones del Congreso. También consideran de «sentido común» que la legislatura se divida en dos años para el candidato de Eivissa y otros dos para la candidata de Formentera.
EU apuesta por un Estado «federal, republicano y social que garantice el bienestar económico, social y cultural». Entre otras cosas, proponen una reforma de la ley electoral para que haya proporcionalidad en el reparto de escaños y «todos los votos valgan igual».
Asimismo, quieren luchar contra la corrupción. Para ello quieren acercar el poder a la ciudadanía, democratizar las instituciones del Estado como RTVE o el Tribunal Constitucional, dignificar la actividad política y profundizar en la transparencia institucional.
También buscan conseguir un Estado laico, por lo que quieren eliminar toda financiación pública o donación de suelo a instituciones religiosas, suprimir la simbología religiosa en espacios y actos públicos y asegurar el respeto en la escuela del pluralismo ideológico.
Asimismo, quieren luchar por una «Europa de los ciudadanos y no de los mercaderes», reinventar Naciones Unidas eliminando el veto del Consejo de Seguridad, retirar las bases de la OTAN, un comercio justo y la necesidad de un Tribunal Internacional que «procese a especuladores financieros y especuladores con los precios de los alimentos».