Pese a que tradicionalmente los empresarios han pedido públicamente más amarres para embarcaciones, no está claro cuántos más se necesitan en Eivissa. Tras el desbloqueo en las tramitaciones de cuatro nuevos proyectos de puertos deportivos por parte del Govern (Punta Xinxó, Port des Torrent, ses Variades y es Viver) se ha generado de nuevo el debate.

Neus Prats, dirigente del grupo ecologista GEN, criticó ayer la reactivación los puertos deportivos y calificó al nuevo Govern de «patético y sin visión de futuro». «No tienen proyecto y solo están decantados de cara a los promotores, sin el más mínimo interés por el futuro de la gente y sin ninguna noción de lo que quiere decir la palabra sostenibilidad», dijo Prats, que confía en que desde Eivissa «alguien haya aprendido algo» y «pare los pies a tanta aberración».

El vicepresidente de la patronal CAEB, Joan Bufí, lo tiene claro. Le parece «muy bien» que se hayan desbloqueado estos proyectos, porque en otros lugares de España se «hicieron muchos» y en Eivissa no. «No quiere decir que se tengan que hacer a troche y moche, pero sí bien distribuidos, porque daría vida a la economía y a la desestacionalización», dice Bufí, que considera que «hacen falta cuatro puertos deportivos más». «Eivissa está muy próxima a la Península y vendría mucha gente también los fines de semana», indicó el empresario, que considera que así se crearían puestos de trabajo. «No queremos que se hagan grandes destrozos, somos defensores del medio ambiente, pero un número determinado de puertos no afectan al medio ambiente», agregó.

No tan constructor se muestra el presidente de la asociación de náutica de la Pimeef, Francisco Morente, quien dice que en la última reunión de la junta directiva estuvieron hablando de esta cuestión y consideraron que se puede hacer algún puerto deportivo más, pero siempre sin romper el entorno. De todas formas, indicó que están «indecisos» sobre esta cuestión, porque no saben si hacer alguna instalación «es bueno o malo». «Lo que sí está claro es que hacen falta puntos de amarre en los meses de junio, julio y agosto, pero en el sector hay un poco de discrepancia sobre lo que se necesita», dijo Morente, que recordó que la alcaldesa de Sant Antoni también está en desacuerdo con el puerto de Punta Xinxó. «Quizás con el que más de acuerdo estaríamos es con el de es Viver, porque es en Eivissa donde hay mayor demanda, pero tampoco está claro», añadió Morente, que no se ha reunido con la junta desde que ha aparecido la noticia de que se han reactivado cuatro puertos deportivos en la isla.

El presidente de la Cambra de Comerç, Vicent Torres, explicó que consideran «importante» el turismo náutico y que hacen falta más amarres, pero matizó que les gustaría que los nuevos puertos deportivos se hicieran en zonas ya «consolidadas y estropeadas». De todas formas, recordó que es una cuestión de legalidad y que hay proyectos que no se pueden impedir. «Los políticos tienen que saber dónde quieren que se hagan puertos deportivos, que se haga una normativa de dónde tienen que ir y se ha acabado», añadió Torres, que cree que un nuevo puerto puede ser positivo en un lugar que se pueda mejorar, pero que también hay que tener cuidado, porque el turismo náutico viene a las islas para navegar y ver paisaje y «si se construye demasiado no tendrá sentido». Recordó que el gobierno del PSOE no ha autorizado nuevos puertos deportivos pero sí ha llenado de amarres la bahía de Sant Antoni.

«Los amarres hacen falta en julio y agosto y son necesarios para barcos grandes, de gran eslora, y para pequeños propiedad de gente de Eivissa», añadió.

Los proyectos de puertos deportivos reactivados por el Govern suman un total de 1.763 amarres más para Eivissa.

El de Punta Xinxó, en Cala de Bou, contemplaba 442 amarres y su tramitación se inició en los años 80. La promotora es la empresa Arquitectura Residencial SL, una empresa de Barcelona que ha ejecutado numerosas promociones en Eivissa. Este puerto recibió un informe favorable del Consell en 2005, cuando Palau era presidente, pero fue archivado en la pasada legislatura por el Govern progresista.

El de es Viver, impulsado por Grupo Matutes y Sirenis había reducido su proyecto de 885 amarres a 694. El Consell y el Govern progresistas lo rechazaron, pero previamente había obtenido el visto bueno en la etapa de Palau, también en 2005. Entonces se argumentó que su ubicación era adecuada al Plan Territorial Insular.

El proyecto de Port des Torrent está impulsado por la empresa alicantina Acintur Bahia SL, del Grupo Acintur Mediterráneo. Este proyecto, que suma 300 amarres, sí fue rechazado por el Consell dirigido por Palau en 2005. El Govern progresista lo archivó en marzo de 2011.

Finalmente, el de ses Variades es un proyecto impulsado por Marina de San Antonio Abad SL, empresa participada por Empresas Matutes. Prevé 327 amarres y en su día el Ayuntamiento de Sant Antoni pidió que se situara a continuación del dique actual. El Govern progresista dio carpetazo a este proyecto en 2011, cuya tramitación comenzó en 2005.

GEN: «Esperamos que desde Eivissa se pare esta aberración»