Terrenos en los que Empresas Matutes planeaba construir un campo de golf. | ARGUI

El presidente del Consell, Vicent Serra, quiso dejar claro ayer que no ha habido nunca «ninguna conversación con nadie» sobre el tema del campo de golf que haya provocado que Empresas Matutes haya retirado el recurso contencioso contra el Consell.

En su día, Matutes presentó un recurso contencioso en los tribunales contra la institución por haberle denegado el interés general para construir el campo de golf de Platja d'en Bossa. Sin embargo, ahora lo ha retirado sin dar explicaciones de por qué lo ha hecho. «El Consell no quiere entrar a valorar suposiciones o rumores o manifestaciones sin fundamento», indicaron desde el Consell y añadieron que siempre actuarán «de forma seria y transparente».

Según relatan desde la institución, los Juzgados reclamaron en su día al Consell que remitiese el expediente del campo de golf y así se hizo. «Ahora el Consell estaba preparando la contestación de la demanda cuando se ha producido el desistimiento del recurso», añadieron las mismas fuentes, que recordaron que el recurso contencioso-administrativo se interpone solo cuando se ha agotado la vía administrativa. El Consell había terminado ya todo el procedimiento administrativo relacionado con el proyecto del golf.

Desde el GEN, Neus Prats explicó que la «maniobra de Empresas Matutes ha sido muy hábil». «Tenía los contenciosos perdidos y sería complicado justificar la autorización de un golf declarado ilegal por los tribunales. Retirando el recurso se ahorra tener que luchar después contra una sentencia desfavorable que estaba cantada. En cualquier caso, la avalancha de informes desfavorables al proyecto continúan existiendo. ¿Es que los políticos de Eivissa no aprenderán nunca?», se preguntó la ecologista.

Empresas Matutes ha renunciado a este recurso, pero no a ejecutar el proyecto.

El PP prometía golf y puertos sotenibles

En la campaña electoral el PP aseguró que posibilitarían la oferta de turismo de campos de golf y puertos deportivos. El presidente del Consell, Vicent Serra, y el vicepresidente del Parlament, Pere Palau, indicaron en mayo, antes de los comicios, que estos nuevos equipamientos debían seguir «criterios de sostenibilidad, integración paisajística, optimización de los recursos existentes y adaptación a la realidad ambiental de Eivissa, siempre que cumplan lo previsto en el Plan Territorial». En el programa también se propuso un pacto territorial con todas las fuerzas políticas.