Las alumnas se lo pasan en grande en el taller.

Existe un pequeño lugar en Sant Antoni, en la parte de atrás de la tienda Patchamanía, donde un grupo de mujeres se reúne todos los días para pasar un rato entre agujas. Pero no piensen mal, simplemente a todas les une su pasión por el patchwork y por las manualidades como el ganchillo, el punto de media, el bordado con cinta o los telares.

«Cuando empiezas no puedes parar y es que el patchwork engancha más de lo que la gente se puede imaginar», asegura Àngels García, la profesora e impulsora de este taller en el que ayer trabajaban unas 12 alumnas.

No en vano ella misma predica con el ejemplo porque ha conseguido transformar su hobby en una forma de vida, montando incluso una tienda e impartiendo talleres, donde enseña a María Antonia, Fina, Chantal, Tiffen, Carolina, María, Conchi, Silviana o Ana «a hacer manteles, colchas, muñecos, tapices decorativos y todo lo que te puedas imaginar con esta técnica».

Precisamente, algunas de estas obras son las que se podrán ver en la exposición que se inaugura mañana a las siete de la tarde en el Faro de Ses Coves Blanques, y que estará abierta en horario de tarde hasta el próximo 21 de enero.

Sin embargo, esta no será la primera vez que algunos de sus trabajos salen del taller: «Solemos trabajar en grupo y por eso hemos conseguido hacer tapices que hemos ido donando a asociaciones de personas con discapacidad, de lucha contra el cáncer, y el último hoy (por ayer) mismo a Caritas».

Algo que es posible gracias al buen ambiente que se vive durante las clases, que se imparten por la mañana de 10,00 a 13,30 y de 17,00 a 20,30 y que hace que, según Àngels, vayan mucho más allá y se hayan convertido en un grupo de amigas con un ambiente increíble que, incluso, organizamos cenas y viajamos juntas, como nuestra próxima salida que haremos a Sitges, donde el próximo mes de marzo se celebra una de las ferias de patchwork más importantes del mundo».