Ayer porla mañana la lluvia arreció con fuerza. Fue la nubosidad lo que impidió que las temperaturas bajaran, aunque partir del mediodía el frío fue en aumento. | Marco Torres

Ante la temida ola de frío siberiano que ha caído sobre toda Europa, las diferentes administraciones han hecho los deberes. En Eivissa y Formentera, donde se mantiene activada la alerta amarilla (riesgo) por viento fuerte con rachas que pueden alcanzar los 70 kilómetros por hora, el Consell Insular, a través de la Conselleria de Sanitat i Benestar Social, ha coordinado las actuaciones de los diferentes ayuntamientos y servicios de emergencias para prevenir posibles problemas derivados de las bajas temperaturas que se esperan. Las actuaciones están pensadas principalmente para la población «más frágil y expuesta».
La consellera de Benestar Social, Mercedes Prats, explicó que todos los ayuntamientos han puesto en marcha sus planes de contingencia para garantizar la coordinación entre los diferentes servicios, incluyendo las policias localse, la unitat d'emergència social (la UME de Cruz Roja), así como diferentes establecimientos hoteleros para facilitar el alojamiento de personas con pocos recursos. En el caso de Eivissa, el Consistorio pagará el alojamiento en un establecimiento hotelero de la ciudad a aquellas personas que habitualmente duermen en la calle.

Nieve
Se espera que en Eivissa el termómetro pueda llegar a descender hasta los dos grados, según las difrenetes predicciones y que incluso pueda nevar en las cumbres más altas. En cuaquier caso, no se espera tan mal tiempo como en el norte de Mallorca y Menorca, donde se ha decretado la alarma naranja. En Mallorca la alerta es por temperaturas mínimas y riesgo de nevadas con acumulación de hasta 5 centímetros de espesor en la Serra de Tramuntana.