El concejal Ignacio Rodrigo, ayer, durante el pleno. | Marco Torres

La modificación de la Ordenanza de horarios de establecimientos, espectáculos públicos y actividades recreativas quedó sobre la mesa porque el texto «es mejorable y rectificar es de sabios», según explicó ayer en el pleno el concejal de Comercio, Ignacio Rodrigo.
El edil matizó que no se harán rectificaciones en la propuesta de reducir las sanciones por incumplimiento de horarios a los bares, restaurantes y cafeterías, aunque «se puede aportar ideas para mejorar el régimen sancionador» y también «volverlo a tratar con la oposición y hacer un planteamiento de común acuerdo para el próximo pleno». En concreto, Rodrigo señaló que «no se modificará lo ya planteado sino que se agregará un cinturón más estricto a esa posibilidad de animar a la reiteración debido a la bajada de sanciones que nos vemos obligados a hacer porque es una decisión jurídica más que política», detalló.
Por su parte, el concejal de PSOE-Pacte, Marc Costa, expresó su «extrañeza» y consideró «muy poco seria la retirada». «Nos parece, como mínimo, poco serio. Pero en todo caso, si es para mejorar la ordenanza, espero que sirva esta rectificación. Si la línea es poner un régimen sancionador que no anime a los infractores a incumplir la norma, nos encontrará», afirmó.
Por su parte, Rodrigo defendió «que lo serio en política es que cuando uno es consciente de que algo se puede mejorar, no encerrarse en posiciones personalistas». «No hay un perjuicio porque los establecimientos no han abierto todavía», agregó.
Cabe recordar que tal y como avanzó este periódico, el objetivo es separar las multas que se aplican a las discotecas y establecimientos con grandes aforos de las que se destinan a restaurantes, bares y cafeterías. Ahora, las sanciones son las mismas y, ya sean locales pequeños o grandes, las cuantías van desde los 6.000 a 15.000 euros si la infracción es leve; de 15.000 a 30.000 si es grave, o de 30.000 a 60.0000 euros si es muy grave, incumplimiento que puede llevar también al cierre de local por un período máximo de seis meses.
Sin embargo, con el cambio en la normativa, los restaurantes, bares, cafés, cafeterías y similares pasarán a pagar sanciones muy inferiores, ya que serán de hasta 750 euros por infracciones leves, entre 750 y 1.500 euros por infracciones graves y entre 1.500 y 3.000 euros por infracciones muy graves. La propuesta de modificación se basa en que estos comercios «tienen menor capacidad económica» que las otras actividades como son discotecas, salas de fiestas o espectáculos musicales de aforo superior, que seguirán con el mismo régimen sancionador previsto inicialmente.

Fraccionan los impuestos para facilitar su pago ante el próximo incremento
El pleno aprobó ayer por unanimidad el fraccionamiento del pago de los impuestos al que podrán acceder tanto particulares como empresas. Según explicó el concejal de Hacienda, Juan Daura, el objetivo es facilitar su pago ante la próxima subida de tasas. «No es obligatorio pero el que quiera acogerse a él podrá pagar a 30 de mayo un 30%, a 31 de agosto un 41%, y el resto será el 20 de octubre», explicó. Asimismo, el edil anunció que «se pueden sumar todos los recibos», ya sean las tasas de basura, IBI, vados, etc.
Por último, explicó que los problemas que tiene la gente para pagar se notan «en un residual de un millón o millón y medio que queda pendiente por pagar cada año».

Desacuerdo entre PP y PSOE-Pacte sobre las cifras de la conectividad aérea
El equipo de gobierno y oposición aprobaron una moción modificada sobre la conectividad área, cuyo texto acordado prevé, entre otras cuestiones, que el Consistorio dé su apoyo al Govern «para continuar trabajando junto al gobierno del Estado para la declaración de servicio público de los vuelos con la península así como en conseguir mejoras de precios y horarios y la reducción de tasas aeroportuarias.
Sin embargo, previamente, la concejala de PSOE-Pacte Carmen Bonet y el edil popular Ingacio Rodrigo tuvieron un desacuerdo sobre las estadísticas de pasajeros. Por un lado, Bonet aseguró que debido a la cancelación de la aportación económica del Consell d'Eivissa a algunas líneas aéreas «ha supuesto una pérdida de 15.000 pasajeros» este invierno. Sin embargo, Rodrigo aseguró que las estadísticas de AENA dicen que, por ejemplo, en diciembre de 2011 «son 6.691 movimientos más que en 2010» y en enero de 2012 cuando el Consell ha dejado de subvencionar las líneas aéreas hay 698 movimientos más».