Hoy mismo estaba previsto que el empresario Abel Matutes y su hija, la exconsellera de Vies i Obres, se sentaran en el banquillo de los acusados por un presunto delito de calumnias contra el exconseller de Mobilitat Albert Prats. Sin embargo, en el último momento el juicio se ha suspendido hasta junio por un error en las notificaciones. Al parecer, no se había procedido a la notificación a la TEF y El Mundo, responsables civiles subsidiarios, ya que en el procedimiento también está imputado un periodista que trabajó para ambos medios.

De esta forma, el juicio, al que también debe asistir el exconseller en calidad de perjudicado, se ha señalado para el 14 de junio.

Albert Prats remarcó en su demanda que tanto los Matutes como el periodista mantuvieron una campaña de calumnias durante meses contra él cuando aún era profesor de instituto y miembro de la Plataforma Antiautopista. Según relata, le acusaron de «violento», «mico», «orangután» y de intentar «agredir» a la exconsellera. En los artículos periodísticos se le tildaba de «Hugo Chávez a la ibicenca» y de «mentir, manipular y amenazar».

Después de que Prats presentara la querella contra los Matutes, éstos contraatacaron con otra contra el exconseller en la que le acusaban de atentado, coacciones y alteración del orden público. Sobre esta causa, en la que Prats estaba imputado, la Fiscalía de Eivissa pidió el archivo.