La infraestructura de acceso al santuario púnico, construida con madera y soga, presenta deficiencias notables.

El acceso a la cueva de es Culleram, en el municipio de Sant Joan, se encuentra mal estado, probablemente a consecuencia de actos vandálicos cometidos durante los meses de invierno, tiempo durante el cual este santuario púnico, uno de los más importantes de la Isla, permanece cerrado.
Desde la valla que impide el paso a la gruta se observa un pequeño cartel de madera escrito a mano en el que se lee «cerrado - close - fin - temporada». Es éste el único cartel que anuncia que la cueva está cerrada, de forma que hay que llegar hasta ella para conocer que no se puede visitar fuera de los meses de temporada turística.
Desde la Conselleria de Cultura, Educació i Patrimoni del Consell d’Eivissa explicaron que «próximamente» está previsto firmar un convenio de colaboración con el Ayuntamiento de Sant Joan que contará con una dotación económica que permitirá la contratación de una persona que se encargará de la vigilancia del santuario.
También confirmaron desde el Consell d’Eivissa que la cueva está cerrada desde principios del mes de noviembre del año pasado. Una vez firmado el convenio con el Ayuntamiento de Sant Joan la cueva quedará abierta al público. Esta previsto que sea en mayo y que permanezca abierta seis meses.