Imagen de un momento del acto de ayer en es Campament.

El manifiesto republicano de este año que fue leído en es Campament, el campo de prisioneros de la Savina donde se vivió uno de los momentos más sórdidos de la postguerra española, hizo especial hincapié en que el día de ayer, «el Govern balear eliminó la Fundación de la Memòria Democràtica que el anterior ejecutivo había puesto en funcionamiento de manera humilde con el único objetivo de dignificar los lugares de la memoria republicana».
Para los responsables de la recuperación de la memoria histórica y de la lucha antifranquista «es así, amparándose en la crisis económica, los actuales gobernantes muestran su talante más autoritario, menos sensible con las víctimas del franquismo».
Ante una treintena de personas, entre las que había un nutrido grupo de políticos pertenecientes a partidos progresistas, como GxF, PSOE e IU, Artur Parrón leyó el manifiesto del Fòrum de la Memòria d’Eivissa i Formentera que apuntaba que el contexto internacional no era favorable a la creación de la IIª República de 1931, ya que se vivía una seria crisis del capitalismo internacional, el fascismo europeo estaba en pleno ascenso y «los sectores poderosos del país, junto con la Iglesia y el Ejército, se opusieron desde el primer momento a los anhelos reformistas de los republicanoa».
Pese a todo, el manifiesto recordaba los logros como «la jornada laboral de ocho horas, la regulación del derecho a huelga, la reforma agraria, la reforma del Ejército, el Estatut de Catalunya y el derecho al voto femenino entre otras conquistas sociales».
Sin embargo desde el Fòrum per la Memòria d’Eivissa i Formentera señalaron que «la actual es una democracia vigilada, limitada por una ley electoral injusta, en la que los poderes financieros y eclesiásticos tienen un poder inmenso, y donde la Monarquía se ha adjudico un papel de garante de la estabilidad que nadie le ha pedido, en un intercambio de favores continuo y obsceno con las grandes empresas».
En es Campament, un símbolo para Formentera de la barbarie franquista, un año más se oyó reivindicar que «construir República es construir democracia y desde la defensa de los espacios de memoria se hace democracia, y por eso los restos del Campament, un antiguo campo de concentración franquista, merecen ser rehabilitados y conservados, porque son memoria, son una lucha por la democracia».
El exalcalde Isidor Torres fue el encargado de tirar a s’Estany d’es Peix el tradicional ramo de flores con los colores republicanos y a continuación se llevó un segundo ramo al Cementerio de Sant Francesc para depositarlo en la fosa donde están los restos de los fallecidos en es Campament. Posteriormente en la Sala Municipal de Cultura se rindió homenaje a Joan Colomar ‘Peret’ fallecido hace unos meses, como símbolo de los anarquistas de Formentera.