El anuncio por parte del Gobierno central de un incremento de las tasas aéreas en la red de aeropuertos de AENA tendrá consecuencias en el resto de integrantes de la cadena turística. Uno de los puntos donde podría producirse más polémica se encuentra en las relaciones que ejercen los touroperadores (TTOO) con los empresarios hoteleros, pues ante una negativa por parte de los mayoristas de asumir los incrementos que supondrían las tasas aéreas, por ejemplo, en el precio que pagaría el cliente final podría generar que los TTOO intentaran presionar a los hoteleros para que fueran éstos quienes bajaran los precios.

Esto podría llegar a producirse este verano en las Pitiüses. «Si no quieren repercutir en el precio que pagaría el cliente final intentarán presionar al resto de integrantes de la cadena turística», explica Juanjo Riera, presidente de la Federación Empresarial Hotelera de Eivissa y Formentera (Fehif).

Riera insta a los empresarios hoteleros de las Pitiüses a que «no cedan ante la presión de los mayoristas» para bajar los precios de los hoteles. El por qué, según explica Riera, está claro: «En los últimos años hemos sufrido una grave pérdida de rentabilidad porque en temporadas como las de 2008, 2009, 2010 e incluso la del año pasado los hoteleros apenas pudimos incrementar el IPC (Índice de Precios al Consumo) en los precios de venta a los mayoristas». Y añade: «Estos precios se mantuvieron de hecho congelados e incluso se redujeron». A ello hay que añadir «las subidas salariales que, en algunos casos, fueron superiores al IPC».

Más factores

Al no incemento del IPC en los precios de venta a mayoristas hay que sumar otros dos factores. El primero de ellos es que, según asegura el presidente de la Fehif, los empresarios hoteleros tuvieron que asumir el incremento del IVA sin que ello tuviera consecuencias en los precios firmados con los mayoristas. «A 1 de julio de 2010 aumentó el IVA del 7 al 8%, lo que hizo que los hoteletos tuviéramos que asumir este incremento sin poderlo repercutir en los precios firmados con los TTOO porque éstos se negocian y se acuerdan un año antes, es decir, los precios de los establecimientos turísticos hoteleros con los touroperadores de este año se firmaron en 2011».

El segundo factor que influye es el aumento de costes: «En la última década en la isla de Eivissa las tasas de basuras subieron un promedio del 54% y el Impuesto sobre Bienes Inmuebles una media del 48,08%. A esto hay que añadir otros costes, como la subida de la energía eléctrica y la subida de los cánones que se pagan por el agua».

Juanjo Riera recuerda que, en un contexto de crisis económica, «la subida del precio del combustible y la subida media de las tasas aéreas de un 10,5% puede provocar aún más una reducción de la capacidad aérea» con la consiguiente caída en el número de pasajeros y turistas.

Sobre los últimos pasos dados en Mallorca en cuanto a renovación del sector hotelero en zonas turísticas maduras a través de iniciativas como el proyecto de reconversión de Magalluf o la remodelación de la playa de Palma, Riera precisa: «Le rogaría al señor Carlos Delgado [conseller de Turisme del Govern] que, además de estas iniciativas y otras como el consenso existente para abrir el Palacio de Congresos de Palma o la consideración de la ciudad de Palma de Mallorca como la

'quinta isla' en el organigrama de la Agència del Turisme Balear (ATB), tuviera en cuenta que las demás islas también existimos», concluye Riera.