Como cada año, el Club Náutico de Eivissa ha iniciado ya sus cursos de verano. A lo largo de esta semana, una treintena de niños y jóvenes de entre siete y catorce años han participado en los talleres de inciación a la vela que imparte la organización deportiva en la playa de Talamanca.
Los cursos, que organiza Club Náutico con la colaboración del Consell d’Eivissa y el Patronato Municipal de Deportes, se dirigen a jóvenes que nunca antes habían navegado o que tienen muy poca experiencia en este deporte. Las clases empezaron el pasado lunes y se han desarrollado a diario de 9 a 13 horas de la mañana. Además, durante las tardes, la Escuela de Vela también ha impartido talleres de perfeccionamiento para niños que ya tienen experiencia en la navegación.
«Lo primero que hacemos es impartir la teoría en el Club y después venimos a la playa y ya navegamos», explican los seis monitores que se encargan de impartir las clases. Eso sí, al principio los alumnos se enfrentan a las clases prácticas en un barco colectivo antes de aprender a navegar en las embarcaciones de clase Optimist. «Lo más importante, más que aprender a navegar, es que valoren este deporte y que les guste practicarlo, que se diviertan con él», aseguran los monitores. A juzgar por las sonrisas de los más pequeños y sus ansias por entrar en el agua, la consecución de este objetivo está más que asegurada. Así lo revelan los gritos de «¡por fin vamos al agua!» de los más pequeños al dirigirse hacia las embarcaciones.
Son cinco los cursos de iniciación que impartirá la Escuela de vela a lo largo del verano, así como cuatro de perfeccionamiento para niños y tres de iniciación para adultos. Además, el Club continúa con sus clases habituales y prepara los diferentes equipos que participaran en regatas a lo largo del verano.
Actividades alternativas
Además de la vela, también es posible realizar cursos de otros deportes, como el kayak, en la misma bahía de la playa de Talamanca. Pequeños grupos de unos diez niños y adolescentes pasan toda la mañana realizando juegos y travesías con las piraguas. Pero eso sí, el primer día también es necesaria una clase teórica en la que se les explican las bases y la historia de este deporte. Y además, al acabar el curso, los monitores realizan un pequeño examen para ver si se han aprendido bien los conocimientos clave.
Quienes también se apuntan al kayak son los alumnos de la iniciativa ‘Un mar de posibilidades’, un proyecto de la asociación Adas desarrollado por el Club Náutico con el apoyo del Consell d’Eivissa y el Ayuntamiento de Eivissa, que realiza actividades diversas para personas con discapacidad.
Se trata de cursos similares al resto de actividades en piragua pero en grupos distintos. Tal y como lo explica Miguel, uno de los monitores de kayak de ambos grupos, «son clases parecidas, pero siguen una dinámica específica; también utilizamos un material distinto». Los objetivos son también diversos y se centran más en ejercicios relacionados con la psicología, la psicomotricidad y con la interrelación personal.
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