Imagen de archivo de la zona de es Pujols, de la isla de Formentera. | Guillermo Romaní

La aprobación inicial de la reforma de la Ley de Costas comenzó ayer su andadura en el Congreso de los Diputados y, con ella, el «reconocimiento» a través de una disposición adicional de la revisión del deslinde costas de Formentera.

El ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Arias Cañete, afirmó que en esta nueva reforma de la ley de Costas «Formentera recibe un tratamiento singular en el proyecto, dada su especial configuración geomorfológica, en cuanto a la delimitación del dominio público», por lo que para asegurar la protección de la isla frente al riesgo urbanístico «se establece que la servidumbre de protección será de 100 metros».

Asimismo, el ministro indicó que en el ámbito de la seguridad jurídica, esta reforma se ha propuesto «garantizar a los ciudadanos la información actualizada, segura y exacta sobre los terrenos que son de dominio público, o pueden serlo, mediante una eficaz coordinación con el Catastro y los registros de la propiedad». Según Cañete, de esta forma se «evitará que adquirentes de buena fe de una vivienda inscrita en el Registro se encuentren con que su propiedad pagada y también inscrita no es realmente suya».

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