La Mesa de Turismo emitió ayer un comunicado para desmentir al grupo ecologista Greenpeace, que aseguró que dos de los grandes beneficiados por la nueva Ley de Costas son los excargos populares Abel Matutes y Gabriel Cañellas, ya que el primero tiene intereses en las salinas de Cádiz y el segundo en ses Salines de Eivissa y Formentera, teniendo en cuenta que ambos espacios dejan de ser públicos con esta nueva normativa.

La Mesa de Turismo, que agrupa a una treintena de las principales empresas turísticas del país y que preside el exministro Abel Matutes, envió ayer este comunicado para «desmentir y rectificar las inexactitudes de Greenpeace sobre las salinas de Cádiz y la Ley de Costas». La Mesa de Turismo recordó que las salinas de Cádiz «han sido propiedad privada desde tiempo de los romanos y están inscritas en el Registro de la Propiedad desde que el registro existe».

[Lea todos los detalles de la información en la edición impresa o en Kiosko y Más].