Los bancos de la oposición, abarrotados con los concejales de PSOE-Pacte, ExC, Epic y ahora del partido reformista.

Como ya viene siendo habitual en las últimas semanas, el debate en el Ayuntamiento de Eivissa versó ayer sobre el caso de las facturas irregulares del grupo Prensa Pitiusa, que ya provocó la dimisión del jefe de gabinete y la ruptura del gobierno con la salida de los dos concejales del Partido Renovador de Eivissa y Formentera (PREF).

Esta vez, los resultados del conflicto se vieron reflejados en el primer pleno municipal con el grupo del PP en minoría y con una multitudinaria bancada de la oposición en la que se apiñaron los doce ediles que ahora la conforman (2 del PREF, 8 de PSOE-Pacte, el concejal de ExC y el de Epic). La polémica también ocupó dos de las cinco horas y media que duró la sesión y en la que el concejal de Hacienda, Juan Daura, avanzó que el informe técnico que elaboró el exjefe de gabinete Antonio Beneyto antes de hacer efectiva su dimisión defiende que «la publicación se ajusta a derecho». «El informe de Beneyto dice muy claro que todos los trabajos que se han hecho en la prensa son correctos e incluso a precios de mercado», insistió tras el pleno en declaraciones a los medios, sobre las facturas efectuadas por anuncios que no se publicaron y que responden a precios fijos mensuales de unos 6.000 euros.