El presidente del Consell, Vicent Serra, bajó a dialogar con los manifestantes.

Alrededor de 50 trabajadores del Consorcio Sociosanitario, que incluye las residencias de Can Blai y Sant Jordi, se manifestaron ayer en la puerta del Consell para protestar por el retraso en las nóminas, por la situación de «abandono» de estos centros y por la falta de un convenio colectivo. Asimismo, recordaron que no se sabe nada todavía de lo que ocurrirá con sus puestos de trabajo el año que viene, cuando pasarán a formar parte de un consorcio balear controlado por el Govern.

Según la presidenta del Comité de Empresa, Victoria Gómez, aunque este mes cobraron el día 5, deberían hacerlo como los demás trabajadores públicos, «como mucho el día 1». Además, denunció que llevan ya seis años sin convenio colectivo y que hay 50 trabajadores (técnicos sociosanitarios y ayudantes de enfermería) cuya categoría el Govern no reconoce y con los que no sabe qué pasará en enero. Asimismo, los sindicalistas volvieron a denunciar las deficiencias que hay en Can Blai, con ascensores que no funcionan, a lo que se unen ahora problemas con el lavaplatos y la lavandería. «Así nos dedicamos a cuidar a la gente mayor de Eivissa que ha sacado la isla adelante», lamentó Gómez.

El presidente del Consell, Vicent Serra, y la consellera de Benestar Social, Mercedes Prats, bajaron a hablar con los manifestantes y les invitaron a mantener una reunión el martes, algo que la sindicalista Gómez consideró que hicieron para «quedar bien ante la prensa» porque aseguró que llevan un «taco de escritos» pidiendo encuentros y siempre les «dan largas».