Los usuarios disponen de más bancos para hacer la espera más agradable y también se ha insonorizado el techo de la estación.

La sociedad gestora Cetis informó ayer de que durante este primer mes de funcionamiento de la nueva estación de autobuses ha trabajado para implementar «algunas mejoras en las instalaciones, atendiendo las peticiones de los conductores de autobuses y de los propios usuarios».

Según detalló en un comunicado de prensa, entre las obras realizadas se ha recortado la isleta de la entrada a la estación, debido a que «algún conductor invadía la Avenida de la Paz con el morro al introducirse en la vía», a la vez que se han redondeado las aceras para evitar que «los conductores, al acercarse demasiado, pudieran perjudicar las ruedas de los autobuses». Asimismo, también en materia de operatividad, la sociedad informó que «se ha ampliado unos 2 metros el radio de curvatura en la parte central de la estación, para facilitar las maniobras».