El Govern continuará este año y el próximo la actual línea de austeridad en la administración pública que sólo en el capítulo personal supuso para las arcas de la comunidad un ahorro de 3,5 millones de euros en el pasado ejercicio, ha dicho la consellera de Administraciones Públicas, Nuria Riera.

«De cara a 2014 tenemos una línea más continuista», ha señalado Riera tras reunirse con el conseller de Hacienda y Administración Pública de la Generalitat Valenciana, Juan Carlos Moragues Ferrer.

Durante la reunión que han mantenido, las dos delegaciones han intercambiado información sobre la auditoría técnica de recursos humanos realizada por el Govern balear y la que está preparando la Generalitat valenciana.

Riera ha señalado que tras la auditoría que el Govern inició a mediados de 2011 se consiguió en 2012 «un ahorro de 3,5 millones de euros en materia de personal, combinado con otras medidas ya que la redistribución en ese momento permitió realizar menos contrataciones».

Con este ahorro en materia de personal y el conseguido con otras medidas de contención del gasto público en la Administración, el Govern economizó un total de 7 millones de euros, según Riera.

La consellera ha añadido que a raíz de la auditoría el Govern hizo «una redistribución del 20-25 por ciento de los puestos de empleados públicos, nuevas funciones y movimientos de plazas a sitios que eran más necesarios».

También Riera ha explicado que tras la auditoría en el Govern se ha intentado potenciar la central de compras, el servicio de ocupación para los desempleados y las áreas de educación, servicios sociales y sanidad.

El presidente del Govern balear, José Ramón Bauzá, anunció el pasado diciembre que en un año había disminuido en un 10 por ciento el número de empleados públicos, de 4.908 a 4.456.

En relación a la auditoría similar que ahora lleva a cabo la comunidad valenciana, Riera ha indicado: «Ellos han compartido con nosotros el trabajo que están realizando en esta materia con la finalidad de reducir la estructura de la administración, aunque sin disminuir aquellas funciones o servicios básicos y esenciales».