El año pasado una rotura del emisario marino obligó a prohibir el baño en Talamanca. | (c) Sergio G. Canizares

Los vecinos de Talamanca llevan muchos años reclamando una solución para el emisario marino de la depuradora que desemboca en la zona. Quieren que se renueve y que se alargue 250 metros para que no afecte a la calidad de las aguas de baño. Sin embargo, la Conselleria balear de Medi Ambient por ahora solo tiene previsto señalizarlo para evitar que los barcos lo rompan al tirar sus anclas.

Según explicó un portavoz de la Conselleria, se colocarán balizas en toda la zona por la que transcurre esta canalización para indicar a las embarcaciones la prohibición de tirar el ancla y evitar así las roturas que se producen, que alguna vez han desembocado en el cierre de la playa.

Nada se sabe sobre una posible renovación de la tubería. Según explicaron desde la Conselleria, no hay ninguna novedad. «Como en el caso de la nueva depuradora de Eivissa, todo depende de que la financiación llegue de Madrid», indicaron las mismas fuentes.