El control de acceso al parque registra el doble de motos (123.000) que de coches (60.000). | Alfredo Montero Mayans

Cerca de 187.000 vehículos (entre coches, motos y quads de personas no residentes) pasaron esta temporada de verano por el control de acceso al parque natural de ses Salines de Formentera, que gestiona la empresa Ibifor, y que se ha establecido por sexto año consecutivo entre los meses de mayo y septiembre. La cifra supone un descenso de más de 20.000 vehículos con respecto al pasado año, según informó ayer el Consell de Formentera.

Este descenso en la cifra de vehículos también repercute en la cantidad ingresada. Ibifor ha recaudado 765.831 euros, lo que supone un 8.75% menos que el verano 2012, momento en que se recaudó un total de 839.218 euros, es decir 73.387 euros menos. Por tipo de vehículos fueron las motocicletas las más numerosas, un total de 123.160, a diferencia de las 139.050 ciclomotores que entraron en el 2012; seguidos de los coches 60.350, ligeramente inferior al 2012 (63.093); y de los quads, un total de 3.997 a diferencia de los 4.497 de 2012.

A pesar de la gran afluencia de vehículos en la zona, este verano sólo fue necesario el cierre del acceso en un total de cinco ocasiones. Esta medida únicamente se adopta cuando se alcanza la capacidad máxima autorizada de vehículos, que en este caso es de 343 coches y 1.132 motos. Para el Consell de Formentera