Las prospecciones afectan a una zona donde se alimentan aves como la pardela balear o 'virot', en peligro de extinción

«Algo he oído, aunque no conozco los detalles». Este comentario es el más repetido en las calles de Eivissa cuando se pregunta sobre las prospecciones petrolíferas que la empresa Cairn Energy tiene previsto iniciar este mismo otoño en el Canal de Valencia, a solo 35 millas de la costa de Eivissa. También hay bastantes encuestados que reconocen no saber «nada» sobre el tema y otros, los menos, que están bien informados sobre el proyecto y sobre el movimiento ciudadano que ha surgido este verano en Eivissa y Formentera para intentar evitar que comiencen los primeros sondeos.

Lo que sí parece claro es que en la calle hay una mayoría de residentes que no quieren que se inicien unos trabajos que, según han puesto de manifiesto diferentes expertos, implican riesgos tanto para la sostenibilidad económica como ambiental de las islas. «Tenemos que defender el futuro de nuestros hijos», afirma Mª Luisa en referencia a la industria turística.

Bikram
«Sí he escuchado algo sobre eso y, desde luego, no estoy de acuerdo», expresa este residente en la isla. Bikram tiene claro que «lo más importante es el turismo y es lo que debe prevalecer». No se puede poner en riego la industria, añade, para que otros hagan dinero. «Para ellos (la empresa) sí es bueno, pero no para el medio ambiente», apunta.
Mª Luisa
En primer lugar Mª Luisa reconoce que sabe poco sobre el tema, «que las van a hacer y poco más». Lo que desconocía es que existe una alianza que engloba a más de 30 entidades para intetar detener las prospecciones. «Tenemos que defender el futuro de nuestro hijos, hay que lucharlo, como los maestros, que no se bajaban del burro».
Esteban
Esteban desconocía que están previstas unas prospecciones petrolíferas en el llamado Golfo de Valencia. «No había escuchado nada en absoluto», asegura. Pero como trabaja de cocinero en un restaurante, puede imaginarse lo que implicaría que un vertido llegase a la costa de Eivissa. «Mejor que no se hagan para que no pase nada», opina.
José
Aunque es mallorquín y está en la isla por trabajo, ofrece rápidamente su opinión. «Lo más probable es que no vaya a reportar riqueza, e incluso si se encontrara petróleo y diese puestos de trabajo, el riesgo es grande», opina. José está sorprendido del «ambientazo» que ve en la isla. «Se nota que hay no pega tanto la crisis y eso es una suerte».

Luis
«Ni idea, me paso el día estudiando o trabajando y no sabía nada», reconoce Luis. Este joven, muy crítico con la industria turística -«ya está en riesgo, se trata fatal al cliente, a la gente de aquí le da hasta vergüenza verlo»- cree que esta ya peligra bastante como para «añadir más problemas». «Pero al final harán lo que quieran», dice.
Priscilla
Esta estudiante explica que «algo» ha oído, especialmente a través de la redes sociales, pero que no conoce los detalles. «Pero creo que me tendré que informar, si hay tanta gente en contra debe ser muy importante», considera Priscilla. Se queja también de que cuestiones determinantes se tomen «sin consultar a nadie».
Ángel
Informado a través de los medios de comunicación locales y de las redes sociales, Ángel tiene muy claros los peligros de estas prospecciones petrolíferas. «Me parece fatal, todo el negocio se va a ir al garete si esto se lleva a cabo», opina este hombre que trabaja como contable en un hotel.
Begoña
«Me parece fatal. Vivimos del turismo y encima de que tenemos problemas de degradación, ahora esto», lamenta. Ella -«como todos menos los funcionarios»- vive del turismo y recuerda que aquí no hay «industria alternativa». A pesar de su «talante positivo», no confía en que se vaya a conseguir detener el proyecto. «Haría falta una concienciación de todos».